Ir al contenido principal

Tránslate / Traducción

Generación de adoradores


Vivimos en un tiempo profético, en el que Dios está levantando una generación que no se inclina ante los ídolos de este mundo, sino que se postra ante el trono de Dios con un corazón sincero y quebrantado.

Mas la hora viene, y ahora es, cuando los verdaderos adoradores adorarán al Padre en espíritu y en verdad; porque también el Padre tales adoradores busca que le adoren. (Juan 4:23)

Eres parte de esta generación. No por méritos ni posición social, sino porque fuiste llamado por el Espíritu Santo a vivir una vida de adoración genuina.

La adoración no se trata solo de cantar canciones o asistir a un culto dominical. Se trata de vivir diariamente para la gloria de Dios. Se trata de reflejar el carácter de Cristo en cada acción, amar como él amó, perdonar como él perdonó y obedecer su Palabra, incluso cuando sea difícil.

La generación de adoradores que el Padre busca es la que entiende que la adoración comienza en secreto, lejos del escenario y de la multitud. Es en el espacio cerrado, en el corazón rendido, en las decisiones de la vida diaria, que esta adoración se manifiesta con poder y verdad.

No importa tu edad, tu pasado ni tus limitaciones. Lo que importa es la disposición de tu corazón. Dios te llama a ser parte de algo más grande, un movimiento de adoración que transforma entornos, sana heridas y atrae la gloria de Dios a la tierra.

Fuiste creado para adorar. Asume tu identidad como adorador hoy. Que tu vida sea un altar vivo ante el Señor. Porque más que palabras, él quiere un corazón rendido.

🤲 ¡Un momento! Antes de continuar, únete a nuestro canal y recibe una palabra de ánimo cada día.

📲 Recibe su Palabra en tu WhatsApp. Únete ahora

Fuiste creado para adorar a Dios

Aparta momentos diarios para estar a solas con Dios, orando y leyendo la Palabra. Es en este espacio íntimo donde tu adoración se vuelve verdadera y transforma tu vida.

Adorar también es obediencia. Elige agradar a Dios con tus acciones, incluso cuando sea difícil. La obediencia revela un corazón entregado y dispuesto a honrar al Señor.

Tu vida debe reflejar a Cristo en casa, en el trabajo y con los amigos. Adorar es amar, perdonar y servir como Jesús, en todo momento y lugar.

Para orar:

Señor, enséñame a buscarte en espíritu y en verdad, a obedecerte con un corazón entregado y sincero. Que mi vida sea un altar vivo, donde tu nombre sea glorificado en cada momento y acción. Renueva mi corazón, alinea mis pensamientos con los tuyos y hazme un instrumento de tu amor. Te entrego todo, Padre. Ayúdame a adorarte no solo con palabras, sino con toda mi vida. Amén.

Comentarios

NOVEDADES

Caminando con Cristo

Muchas veces, en nuestro caminar con Dios, podemos sentir que todavía estamos lejos de ser perfectos. Nos enfrentamos a luchas, fracasos y momentos en los que pensamos que no estamos progresando como nos gustaría.  Pero el apóstol Pablo nos recuerda en Filipenses 3:12-14 que no importa cuán imperfectos seamos o cuántos errores hayamos cometido en el pasado, Dios nos llama a seguir adelante. No que lo haya alcanzado ya, ni que ya sea perfecto; sino que prosigo, por ver si logro asir aquello para lo cual fui también asido por Cristo Jesús. Hermanos, yo mismo no pretendo haberlo ya alcanzado; pero una cosa hago: olvidando ciertamente lo que queda atrás, y extendiéndome a lo que está delante, prosigo a la meta, al premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús. (Filipenses 3:12-14) No necesitamos quedarnos estancados en el pasado. En Cristo, tenemos una nueva oportunidad cada día. Lo más importante es seguir avanzando, manteniendo siempre la mirada fija en el objetivo, que es n...

Dios puede animar tu día

Hoy compartimos una verdad transformadora: el poder de Dios es capaz de animar tu vida diaria. En medio de la adversidad, es reconfortante saber que tenemos un Dios que está siempre a nuestro lado, dispuesto a fortalecernos y animarnos. La Palabra de Dios asegura en Isaías 41:10: Así que no temas, porque yo estoy contigo; no te angusties, porque yo soy tu Dios. Te fortaleceré y te ayudaré; te sostendré con mi diestra victoriosa. (Isaías 41:10) Es una promesa fortalecedora que muestra que Dios no solo está con nosotros, sino que también nos permite vencer los desafíos. Cuando el día se sienta pesado, recuerda Filipenses 4:13: "Todo lo puedo en Cristo que me fortalece". No nos enfrentamos solos a los desafíos: el Señor nos acompaña y nos capacita para superar cualquier situación. Además, cada mañana la misericordia de Dios es nueva (Lamentaciones 3:22-23), brindándonos un nuevo día lleno de oportunidades para experimentar el amor y el aliento divinos. Por tanto, deja tu día en ...

Con Cristo, todo el año es un año nuevo

Hermanos, no pienso que yo mismo lo haya logrado ya. Más bien, una cosa hago: olvidando lo que queda atrás y esforzándome por alcanzar lo que está delante, sigo avanzando hacia la meta para ganar el premio que Dios ofrece mediante su llamamiento celestial en Cristo Jesús. (Filipenses 3:13-14) El final del año es por lo general un momento de conmemoración, aunque no para todos. Para algunas personas pensar en el próximo año puede causar desánimo: "da igual, todos los años son iguales". No todos actúan de la misma manera ante la expectativa de un año nuevo. La mejor manera de romper con el desánimo es ser sincero con Dios. No hay nada mejor que abrir el corazón y exponer tus expectativas antes del "cambio de año". Dios es misericordioso, él nos oye, y es eso lo que desea que hagamos. Solo el Espíritu Santo es capaz de calmarnos y de confortarnos. ¡Permítele que lo haga! Sé sincero contigo y reconoce todo lo que Dios ha hecho en tu vida. Desarrollar un corazón agradeci...