Ir al contenido principal

Tránslate / Traducción

The difference between a twig and a fish.









Feeding

 Ourselves

 







by Julie Ackerman Link

The eaglets were hungry, and Mom and Dad seemed to be ignoring them. The oldest of the three decided to solve his hunger problem by gnawing on a twig. Apparently it wasn’t too tasty, because he soon abandoned it.

nest

What intrigued me about this little drama, which was being broadcast by webcam from Norfolk Botanical Garden, was that a big fish lay just behind the eaglets. But they had not yet learned to feed themselves. They still relied on their parents to tear their food in tiny pieces and feed it to them. Within a few weeks, however, the parents will teach the eaglets how to feed themselves—one of their first survival lessons. If the eaglets don’t learn this skill, they will never be able to survive on their own.









Read: Hebrews 5:12–6:2


( Hebrews - 5 -Audio-)
   

















By this time you ought to be teachers. —Hebrews 5:12


The author of Hebrews spoke of a similar problem in the spiritual realm. Certain people in the church were not growing in spiritual maturity. They had not learned to distinguish between good and bad (Heb. 5:14). Like the eaglet, they hadn’t learned the difference between a twig and a fish. They still needed to be fed by someone else when they should have been feeding not only themselves but others as well (v.12).
sipitirualfood
While receiving spiritual food from preachers and teachers is good, spiritual growth and survival also depend on knowing how to feed ourselves.


You’ve given us Your Spirit, Lord, To help us grow, mature, and learn, To teach us from Your written Word, So truth from error we’ll discern. —Sper  
  Spiritual growth requires the solid food of God’s Word. 










Bible in a Year:
Judges 11-12; Luke 6:1-26


"Reflexions from Our Daily Bread"
Posted by: Ben Ayala :  benayalal@gmail.com email
Thanks to the Sources at: rbc[dot]org  -and- odb[dot]org
fbFollow Pastor Tony at:
www.facebook.com/roberto.bonillacea
YouTube                                                                                       googleplus










Comentarios

NOVEDADES

Caminando con Cristo

Muchas veces, en nuestro caminar con Dios, podemos sentir que todavía estamos lejos de ser perfectos. Nos enfrentamos a luchas, fracasos y momentos en los que pensamos que no estamos progresando como nos gustaría.  Pero el apóstol Pablo nos recuerda en Filipenses 3:12-14 que no importa cuán imperfectos seamos o cuántos errores hayamos cometido en el pasado, Dios nos llama a seguir adelante. No que lo haya alcanzado ya, ni que ya sea perfecto; sino que prosigo, por ver si logro asir aquello para lo cual fui también asido por Cristo Jesús. Hermanos, yo mismo no pretendo haberlo ya alcanzado; pero una cosa hago: olvidando ciertamente lo que queda atrás, y extendiéndome a lo que está delante, prosigo a la meta, al premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús. (Filipenses 3:12-14) No necesitamos quedarnos estancados en el pasado. En Cristo, tenemos una nueva oportunidad cada día. Lo más importante es seguir avanzando, manteniendo siempre la mirada fija en el objetivo, que es n...

Dios puede animar tu día

Hoy compartimos una verdad transformadora: el poder de Dios es capaz de animar tu vida diaria. En medio de la adversidad, es reconfortante saber que tenemos un Dios que está siempre a nuestro lado, dispuesto a fortalecernos y animarnos. La Palabra de Dios asegura en Isaías 41:10: Así que no temas, porque yo estoy contigo; no te angusties, porque yo soy tu Dios. Te fortaleceré y te ayudaré; te sostendré con mi diestra victoriosa. (Isaías 41:10) Es una promesa fortalecedora que muestra que Dios no solo está con nosotros, sino que también nos permite vencer los desafíos. Cuando el día se sienta pesado, recuerda Filipenses 4:13: "Todo lo puedo en Cristo que me fortalece". No nos enfrentamos solos a los desafíos: el Señor nos acompaña y nos capacita para superar cualquier situación. Además, cada mañana la misericordia de Dios es nueva (Lamentaciones 3:22-23), brindándonos un nuevo día lleno de oportunidades para experimentar el amor y el aliento divinos. Por tanto, deja tu día en ...

Con Cristo, todo el año es un año nuevo

Hermanos, no pienso que yo mismo lo haya logrado ya. Más bien, una cosa hago: olvidando lo que queda atrás y esforzándome por alcanzar lo que está delante, sigo avanzando hacia la meta para ganar el premio que Dios ofrece mediante su llamamiento celestial en Cristo Jesús. (Filipenses 3:13-14) El final del año es por lo general un momento de conmemoración, aunque no para todos. Para algunas personas pensar en el próximo año puede causar desánimo: "da igual, todos los años son iguales". No todos actúan de la misma manera ante la expectativa de un año nuevo. La mejor manera de romper con el desánimo es ser sincero con Dios. No hay nada mejor que abrir el corazón y exponer tus expectativas antes del "cambio de año". Dios es misericordioso, él nos oye, y es eso lo que desea que hagamos. Solo el Espíritu Santo es capaz de calmarnos y de confortarnos. ¡Permítele que lo haga! Sé sincero contigo y reconoce todo lo que Dios ha hecho en tu vida. Desarrollar un corazón agradeci...