Ir al contenido principal

Tránslate / Traducción

Beneficios que ofrece la sabiduría



Proverbios 2

1 Haz tuyas mis palabras, hijo mío; guarda en tu mente mis mandamientos.a 2 Presta oído a la sabiduría; entrega tu mente a la inteligencia. 3 Pide con todas tus fuerzas inteligencia y buen juicio;

4 entrégate por completo a buscarlos, cual si buscaras plata o un tesoro escondido.b

5 Entonces sabrás lo que es honrar al Señor;c ¡descubrirás lo que es conocerd a Dios! 6 Pues el Señor es quien da la sabiduría;e la ciencia y el conocimiento brotan de sus labios.

7 El Señor da su ayuda y protección a los que viven rectamente y sin tacha;f 8 cuida de los que se conducen con justicia y protege a los que le son fieles.g h 9 Sabrás también lo que es recto y justo, y estarás atento a todo lo bueno,i 10 pues tu mente obtendrá sabiduría y probarás la dulzura del saber.j

11 La discreción y la inteligencia serán tus constantes protectoras;k 12 ellas te librarán del mal camino y de los hombres perversos, 13 de los que dejan el buen camino y van por senderos oscuros,l 14 que se divierten haciendo daño y festejan sus malas acciones,m 15 que andan por caminos torcidosn y se han desviado del recto sendero.

16 Te librarán también de la mujer ajena, de la extraña de palabras seductorasñ 17 que abandona al compañero de su juventud y olvida su compromiso con Dios.o 18 Tomar el camino que lleva a la casa de ella es tomar el camino que lleva a la muerte.p 19 Los que entran en su casa, ya no regresan; jamás vuelven a recorrer el sendero de la vida.q

20 Anda, pues, por el buen camino, y practica la conducta de los justos. 21 Porque los que viven rectamente y sin tacha, vivirán para siempre en la tierra;r 22 pero los malvados y traidores serán arrancados y expulsados de ella.s t
______________________________________________________
Follow on Facebook TBM-Missions:  https://www.facebook.com/roberto.bonillacea

Sitio Web Dedicado a Video: TBM-Missions TV

Comentarios

NOVEDADES

Caminando con Cristo

Muchas veces, en nuestro caminar con Dios, podemos sentir que todavía estamos lejos de ser perfectos. Nos enfrentamos a luchas, fracasos y momentos en los que pensamos que no estamos progresando como nos gustaría.  Pero el apóstol Pablo nos recuerda en Filipenses 3:12-14 que no importa cuán imperfectos seamos o cuántos errores hayamos cometido en el pasado, Dios nos llama a seguir adelante. No que lo haya alcanzado ya, ni que ya sea perfecto; sino que prosigo, por ver si logro asir aquello para lo cual fui también asido por Cristo Jesús. Hermanos, yo mismo no pretendo haberlo ya alcanzado; pero una cosa hago: olvidando ciertamente lo que queda atrás, y extendiéndome a lo que está delante, prosigo a la meta, al premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús. (Filipenses 3:12-14) No necesitamos quedarnos estancados en el pasado. En Cristo, tenemos una nueva oportunidad cada día. Lo más importante es seguir avanzando, manteniendo siempre la mirada fija en el objetivo, que es n...

Dios puede animar tu día

Hoy compartimos una verdad transformadora: el poder de Dios es capaz de animar tu vida diaria. En medio de la adversidad, es reconfortante saber que tenemos un Dios que está siempre a nuestro lado, dispuesto a fortalecernos y animarnos. La Palabra de Dios asegura en Isaías 41:10: Así que no temas, porque yo estoy contigo; no te angusties, porque yo soy tu Dios. Te fortaleceré y te ayudaré; te sostendré con mi diestra victoriosa. (Isaías 41:10) Es una promesa fortalecedora que muestra que Dios no solo está con nosotros, sino que también nos permite vencer los desafíos. Cuando el día se sienta pesado, recuerda Filipenses 4:13: "Todo lo puedo en Cristo que me fortalece". No nos enfrentamos solos a los desafíos: el Señor nos acompaña y nos capacita para superar cualquier situación. Además, cada mañana la misericordia de Dios es nueva (Lamentaciones 3:22-23), brindándonos un nuevo día lleno de oportunidades para experimentar el amor y el aliento divinos. Por tanto, deja tu día en ...

¡Exalta al Señor con tus alabanzas!

Alaben al SEÑOR, porque es bueno: ¡Porque para siempre es su misericordia! (Salmo 136:1) En la lucha o en la alegría, nuestro llamado es el mismo: exaltar al Señor con nuestras alabanzas. La alabanza es más que una canción. Es una expresión viva de nuestra fe, una declaración de que Dios es soberano, sin importar las circunstancias. Cuando alabamos a Dios, algo poderoso sucede en nosotros. El desánimo se desvanece, las dudas se disipan y la presencia de Dios se hace más real. La alabanza nos recuerda quién es Dios: fiel, justo, amoroso, poderoso. Él es digno de todo nuestro reconocimiento, no solo cuando todo va bien, sino también cuando enfrentamos el valle de sombra de muerte. Exaltar al Señor con toda alabanza es un acto de entrega y confianza. Es decir con el corazón: «Señor, te adoro no por lo que haces, sino por quién eres». En medio del dolor, alaba. En un buen día, alaba. En cada etapa de tu vida, alza la voz y glorifica a aquel que nunca falla. La alabanza transforma el entorn...