En el Antiguo Testamento vemos que Dios quiso establecer un pacto con el pueblo de Israel. Quería bendecir a este pueblo y glorificarse por medio de ellos. Como todo pueblo y toda nación en este mundo, Israel necesitaba estructura y orden. Una de las formas como Dios proveyó esto fue estableciendo lo que hoy conocemos como los Diez Mandamiento. Dos meses después de haber salido de Egipto, Israel llegó al lugar en el desierto donde está el Monte Sinaí. Durante tres días Dios ordenó a Moisés a preparar el pueblo porque quería descender sobre ellos y establecer su pacto. Cuando el pueblo estuvo listo para estar en su presencia, Dios se manifestó en forma de fuego. Dice el capítulo 19 de Éxodo que el monte entero estaba cubierto en humo y temblaba violentamente. El pueblo, asustado, estaba abajo del monte con Moisés y Aarón frente a ellos, esperando escuchar lo que Dios iba a decir. Ese día Dios estableció la lista de reglas que hoy conoce...
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