Ir al contenido principal

Tránslate / Traducción

¿Como es Dios? Estudio Biblíco (Parte 1)

¿Alguna vez te has preguntado cómo es Dios? Dios es tan grande y tan maravilloso que nunca podremos saber todo acerca de Él.



Pero Dios nos ha dado un maravilloso libro que nos habla de Él ¿Cuál es ese libro? Es la Biblia, la Palabra de Dios.

La Biblia nos dice que Dios creó todas las cosas. Él hizo el sol y la luna. Hizo millones de estrellas que brillan en el cielo en la noche. Dios creó la tierra, los pájaros, los peces y todos los demás animales. Luego Dios creó al primer hombre y a la primera mujer.

¿Para qué nos creó Dios? Nosotros fuimos creados para amar a Dios y para ser amados por Él. Dios conoce y ama a cada uno de nosotros.

A Dios le complace mucho cuando queremos conocerlo y amarlo. Conocer y amar a Dios es lo mejor que podemos hacer en la vida. Esto nos hará realmente felices.

Aprenderemos cinco cosas importantes de nuestro maravilloso Dios quien nos ama mucho.

Hay sólo un Dios—el Dios verdadero y viviente. Él dijo: "Yo soy Jehová, y ninguno más hay; no hay Dios fuera de mí..." (Isaías 45:5).

Dios no es una "fuerza". Dios es un Dios vivo que conoce y ama a cada uno de nosotros. Dios se complace cuando nosotros deseamos conocerle. Por sobre todo, Dios quiere que nosotros le amemos con todo nuestro corazón.

Aunque Dios es Persona, Él no tiene un cuerpo como lo tenemos nosotros. Dios es Espíritu. No podemos ver a un espíritu. Cuando Dios nos hizo, Él nos dio un cuerpo. Él también nos dio un espíritu. Tu espíritu vive dentro de tu cuerpo. Otras personas pueden ver tu cuerpo, pero ellas no pueden ver tu espíritu.

Porque Dios es Espíritu, por ese motivo no podemos verle. Dios nos dice que no hagamos ninguna imagen para representarlo. Dios nos dice que no debemos adorar ninguna imagen. La Biblia dice:

"Dios es Espíritu; y los que le adoran, en espíritu y en verdad es necesario que le adoren" (Juan 4:24).

Aunque no podemos verle Dios es el único Dios verdadero y viviente. Él quiere que lo conozcamos. Cuando conocemos a Dios, le amaremos. Cuando le amamos desearemos obedecerle.

La gloria de Dios es tan esplendorosa que no podríamos mirarla. No podemos mirar el sol cuando brilla fuerte sobre un cielo despejado, porque nos lastima los ojos. Si fuéramos a mirar el sol por mucho tiempo, podríamos perder la vista.

La gloria de Dios es mucho más grande y más esplendorosa que la del sol. Por eso no podemos ver a Dios. Él dijo: “...porque no me verá hombre, y vivirá” (Exodo 33:20).

La Biblia nos habla acerca de un hombre llamado Moisés. Moisés fue un amigo especial de Dios. Muchas veces él habló con Dios y Dios también hablaba con él. Pero Moisés nunca vio a Dios.

Un día Moisés le pidió un favor especial a Dios. Le dijo: “Te ruego que me muestres tu gloria” (Exodo 33:18).

Dios le dijo a Moisés: “No puedes ver Mi rostro, porque ningún hombre puede verme y vivir. Pero te esconderé en la peña, y luego pasaré cerca de ti”.

Moisés subió a la montaña solo. Dios lo escondió en la hendidura de la peña (una abertura en la montaña). Luego Dios hizo que Su Gloria pasara cerca de Moisés. Él no vio a Dios, pero vio un poquito de la gloria de Dios y esto hizo que su rostro brillara como el sol.

Cuando Moisés bajó de la montaña, su rostro brillaba tanto que el pueblo tuvo miedo de él. Con razón Moisés y el pueblo dijeron: “¿Quién como tú, oh Señor... magnífico en santidad?” (Exodo 15:11).

Esto significa que Dios es puro y perfecto sin ningún pecado en absoluto. En la Biblia algunas veces la oscuridad representa el pecado. La Biblia dice de Dios: “Dios es luz, y no hay ningunas tinieblas [pecado] en Él” (1 Juan 1:5).

Dios es todo luz y gloria.Dios es puro. Dios nunca peca. Dios siempre hace lo que es bueno y correcto. Nunca nada pecaminoso puede acercarse a la presencia de Dios. La Biblia dice: “Jehová nuestro Dios es santo” (Salmo 99:9).

Una vez Dios le habló a un profeta llamado Isaías en una visión. Una visión es como un sueño. Isaías vio una visión de Dios en Su trono. Alrededor del trono había muchos ángeles, adorando a Dios y diciendo:

“Santo, Santo, Santo, Jehová de los ejércitos; toda la tierra está llena de su Gloria”
(Isaías 6:3).

Cuando Isaías vio esta visión de Dios tuvo miedo. La visión le mostraba que él era pecador y que Dios es santo.

Esto significa que Dios nos ama y quiere sólo lo mejor para nosotros. Aunque Él es el Rey del universo y tiene todo poder y gloria, Dios conoce y ama a cada uno de nosotros. Él te conoce a ti y te ama.

Quizás te preguntes: “¿Cómo puedo saber que Dios me ama?” Hay dos maneras para saber que Dios nos ama:

Sabemos que Dios nos ama porque Dios nos lo dice.

En Su Palabra Dios dice: “Con amor eterno te he amado” (Jeremías 31:3).
Sabemos que Dios nos ama porque envió a Su Hijo para tomar el castigo por nuestros pecados.

Dios demostró Su gran amor por nosotros al darnos a Su Hijo, el Señor Jesús, para morir en una cruz por nuestros pecados (las cosas malas que nosotros hemos dicho o hecho). La Biblia dice:

“Mas Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros” (Romanos 5:8).

Tú puedes estar pensando: “¿Conoce Dios acerca de todas las cosas malas que yo he dicho y hecho?” Sí, Dios sabe todo acerca de ti, pero aun así El te ama con todo Su corazón. El te ama cada minuto de tu vida.

El Señor Jesús murió por mis pecados. Él murió por TUS pecados. Pero Él no se quedó muerto. Él resucitó de la tumba al tercer día. ¡Él es nuestro Salvador viviente! Dios quiere que tú creas en Él como Aquel que murió por tus pecados y resucitó para ser tu Salvador.

¿Sabes tú qué es lo que Dios más desea que tu hagas? ¡Él quiere que tú le ames con todo tu corazón!

A Él le complace cuando decidimos amarle con todo nuestro corazón. En la Biblia leemos que el rey David fue un gran hombre de Dios. Él dijo: “¡Te amo, oh Jehová!” Esto agradó a Dios mucho. Le agradará a Dios mucho si tú decides amarle como David le amó. Aquí hay una oración que te ayudará:

"Querido Dios, yo quiero amarte con todo mi corazón. Ayúdame a aprender más acerca de ti. Gracias por amarme tanto y por enviar a tu Hijo Jesús, para morir en una cruz por mis pecados".

_______________________________________________________________
Follow on Facebook TBM-Missions: https://www.facebook.com/roberto.bonillacea
Sitio Web Dedicado a Video: TBM-Missions TV 170617

Comentarios

  1. Romanos 9:16 Reina -Valera 1960 (RVR1960)

    Así que no depende del que quiere, ni del que corre, sino de Dios que tiene misericordia.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

NOVEDADES

"¿Debe o no, una iglesia dar el diez por ciento de las ofrendas que recibe?"

"¿Qué dice la Biblia acerca del diezmo?" Diezmar / ofrendar debe ser un gozo, una bendición.  Tristemente, casi nunca es ese el caso en la iglesia de hoy. Diezmar es un asunto con el que muchos cristianos luchan dia a dia. En muchas iglesias locales ponen demasiado énfasis en diezmar. Al mismo tiempo, muchos cristianos rehúsan someterse a la exhortación bíblica tocante a ofrendar al Señor. Diezmar es un concepto del Antiguo Testamento. El diezmo era un requisito de la ley en la cual todos los Israelitas ofrendaban al tabernáculo / templo el 10% de todo lo que ganaban y hacían crecer ( Levítico 27:30; Números 18:26; Deuteronomio 14:23; 2 Crónicas 31:5 ).  El Nuevo Testamento en ninguna parte ordena, o aún recomienda que los cristianos se sometan a un sistema legalista de diezmar.  Pablo declara que los creyentes deberían apartar una porción de sus ingresos a fin de dar soporte a la iglesia ( 1 Corintios 16:1-2 ). El Nuevo Testamento en ningún lugar señala un cierto porcent...

El Señor nos oye en el día de angustia

Que el Señor te oiga en momentos de angustia; que te defienda el Nombre, el Dios de Jacob. (Salmo 20:1) Cuando todo parece desmoronarse y nuestras almas están abatidas, hay una promesa que brilla como la luz en la oscuridad: el Señor nos escucha en el día de la angustia. Este breve, pero profundo versículo, revela el corazón de un Dios que no es indiferente a nuestro sufrimiento. Él no se limita a observar desde lejos, sino que inclina sus oídos al clamor sincero de quienes lo buscan. El salmista habla con certeza: «Que el Señor te oiga…». Nos reconforta saber que no estamos solos cuando el miedo llama a la puerta, cuando los planes fallan o cuando se nos acaban las fuerzas. La oración, en este contexto, no es un acto religioso vacío, sino un encuentro con el Dios vivo, que nos ayuda, nos protege y nos fortalece. Y todavía hay más: «que te defienda el Nombre, el Dios de Jacob». El nombre de Dios no es solo un título. Es una expresión de su carácter, su fidelidad, su pacto. El ...

Eres un canal de bendición para tu prójimo

Y de hacer bien y de la ayuda mutua no os olvidéis; porque de tales sacrificios se agrada Dios. Hebreos 13:16) ¿Alguna vez te has parado a pensar en el impacto que tu vida tiene en las personas que te rodean? A menudo creemos que para marcar la diferencia necesitamos hacer grandes cosas, pero la verdad es que cada acto de amor y generosidad cuenta. Una sonrisa, una palabra de aliento o un simple gesto de ayuda pueden transformar el día de alguien. Dios nos ha llamado a ser canales de bendiciones. Él nos da talentos, recursos y oportunidades para compartir con los demás. Cuando tendemos la mano a los necesitados, reflejamos el amor de Cristo y difundimos esperanza. Nuestra vida adquiere un propósito mayor cuando dejamos de mirar solo nuestras propias necesidades y empezamos a ver a los demás con compasión. Incluso en tiempos difíciles, puedes ser un instrumento de Dios. Tal vez una palabra reconfortante tuya sea justo lo que alguien necesita escuchar. Ayudar no es solo dar algo material...