Ir al contenido principal

Tránslate / Traducción

MI REFUGIO

Fortaleza contra la tentación.

“No les ha sobrevenido ninguna tentación que no sea común a los hombres. Fiel es Dios, que no permitirá que ustedes sean tentados más allá de lo que pueden soportar, sino que con la tentación proveerá también la vía de escape, a fin de que puedan resistirla”,
1 Corintios 10:13

“Dios nunca te dará más de lo que puedes soportar”.

Creo que todos hemos escuchado esta frase en algún momento, usualmente en medio de momentos de sufrimiento.

De hecho, muchos han abrazado este concepto asumiendo que Dios les quitará el sufrimiento o el dolor ya cuando lleguen al punto de donde no lo podrán soportar más.

La pregunta importante es,

¿qué es lo que nos está diciendo la Biblia aquí?

Malinterpretar este versículo abre la puerta a dos grandes errores.

Primero, podemos caer en orgullo.

Nos consideramos más fuertes de lo que somos y que somos algo impresionante porque, obviamente tenemos en nosotros mismos la gran habilidad de poder soportar cualquier sufrimiento, aún más de lo que puedan muchos otros cristianos.

Por otro lado, definimos lo que somos capaces de “soportar” en base a nuestras emociones o nuestras propias fuerzas.

Nos llenamos de una falsa esperanza que Dios nunca dejará que nosotros pasemos por algo que afectará nuestra salud, nuestra familia, nuestras finanzas, etc.

Más Jesús en su palabra nos anima y renueva nuestras fuerzas 1 Corintios 10:13: «Dios […] dará también juntamente con la tentación la salida, para que podáis soportar».

En el contexto de este versículo Dios nos alienta a salir de la tentación, pero muchas veces no podemos hacer lo mismo con el sufrimiento.

El propio Jesús deseaba encontrar una vía de escape a su futuro sufrimiento, cuando oró: «…Padre mío, si es posible, pase de mí esta copa…» (Mateo 26:39) .

No obstante, de manera voluntaria, sufrió esa experiencia para darnos la salvación.

Cuando las circunstancias de la vida parecen imposible de soportar, es cuando debemos entregarnos en las manos Dios y dejar que Él nos sostenga.


Dile al Señor:

“¡Padre amado tu eres mi refugio y fortaleza, tómame en tus brazos, guardame en tu regazo!
26616

Comentarios

NOVEDADES

Regocijaos en el Señor

Regocijaos en el Señor siempre. Otra vez digo: ¡Regocijaos! (Filipenses 4:4) Jesús es el motivo de mi sonrisa, porque en su presencia encuentro la verdadera alegría. No es una alegría pasajera que depende de las circunstancias, sino una paz duradera que trasciende las dificultades. En medio de las dificultades de la vida, puedo confiar en que él está a mi lado, tomándome de la mano y guiándome por el camino seguro. La sonrisa que Jesús pone en mi rostro es un reflejo de su amor inconmensurable. Cuando miro la cruz, recuerdo el sacrificio que él hizo por mí y mi corazón se llena de gratitud. Él me amó primero, incluso cuando todavía estaba perdido. Este amor incondicional me sostiene y me da fuerzas para afrontar cada nuevo día con esperanza. Las promesas de Jesús son fuentes de alegría. Él nos prometió vida abundante y en su palabra encuentro consuelo y dirección. Cuando estoy cansado, encuentro descanso en sus brazos. Cuando estoy triste, él es mi alegría. Cuando soy débil, él es mi f...

¿Qué debo hacer cuando no logro entender?

Lo secreto le pertenece al Señor nuestro Dios, pero lo revelado nos pertenece a nosotros y a nuestros hijos para siempre, para que obedezcamos todas las palabras de esta ley. (Deuteronomio 29:29) Moisés llegaba al final de su vida. Él estaba consciente de que moriría poco después sin lograr entrar a la "Tierra Prometida". En sus últimas palabras para el pueblo de Israel, él afirmó que existen cosas encubiertas para nosotros. Son cosas que no entenderemos jamás en esta vida, pues huyen a nuestra comprensión humana. Hay tres actitudes que nos pueden ayudar a lidiar con lo que no logramos entender: Confianza - Aun cuando no entendamos lo que sucede, podemos confiar en el Señor, pues sabemos que él conoce lo que es mejor para nosotros. Obediencia - No necesitamos entender para obedecer. La confianza nos lleva a obedecer aunque no entendamos todo. Humildad - Obedecer sin comprender, también exige humildad. La humildad nos ayudará a aceptar aquello que no entendemos. Confía y obede...

Conectado con Dios

En el mundo acelerado en el que vivimos, es fácil quedar atrapado en las redes sociales, los juegos, la música y todas las distracciones que nos ofrece la vida moderna.  Pero como cristianos, es esencial que recordemos este versículo: Clama a mí y te responderé; te daré a conocer cosas grandes e inaccesibles que tú no sabes. (Jeremías 33:3) La tecnología nos permite estar conectados con el mundo, pero a veces nos olvidamos de conectarnos con Dios. Él siempre está dispuesto a escuchar nuestras oraciones, responder nuestras preguntas y revelarnos maravillas que van más allá del entendimiento humano. La oración es nuestra conexión directa con Dios. Conectarnos con Dios no significa abandonar nuestra vida cotidiana, sino que lo incluimos en todos los aspectos de la misma. Al comenzar el día con oración, dar gracias por sus bendiciones, buscar su guía en tiempos de duda y compartir su mensaje de amor y esperanza con los demás, estamos verdaderamente conectados con Dios. A medida que bus...