Diseño de currículo y elaboración de lecciones
Orientación
Una filosofía de educación nos dirigirá en la forma en que diseñamos nuestro programa de educación cristiana.
Pero aún necesitamos hacer decisiones sobre lo que enseñaremos y cómo lo enseñaremos.
A las declaraciones sobre lo que vamos a enseñar se les llama currículo.
A las declaraciones sobre la forma en que vamos a enseñar se les llama planes instruccionales.
Primero hablaremos sobre el desarrollo de currículo y luego de la creación de un plan instruccional.
Objetivos de aprendizaje
Al final de esta lección, los participantes podrán
• Identificar tres currículos que enseñan las escuelas.
• Hacer una lista de principios básicos de desarrollo de currículo.
• Identificar cuatro pasos de la preparación de la lección.
• Desarrollar dos anzuelos para una lección sobre educación cristiana.
Currículo
Definición de currículo
Cuando hablamos de currículo, ¿qué significa para usted?
En Estados Unidos la gente piensa en materiales impresos que se pueden comprar en alguna tienda.
Por currículo queremos decir la organización de las metas y las actividades de aprendizaje que usamos en un evento de enseñanza y aprendizaje.
Otros definen el currículo como todo lo que ocurre en la preparación y en el ambiente de aprendizaje.
Pensemos en estos términos generales.
Tres currículos que usan todas las escuelas
Hay cierta dinámica de un currículo o de todas las actividades del ambiente de aprendizaje.
En realidad son tres los currículos que están presentes en todo tiempo.
1. Explícito—Este es el currículo declarado, lo que la escuela se propone y anuncia acerca de ella misma en su sílabo o en promoción.
Todos los estudiantes están conscientes de ello.
Con frecuencia se asume que este es el único tipo de currículo.
También y con frecuencia es en el que más nos ocupamos.
2. Implícito—la cultura del medio ambiente educativo relaciona socialmente a los estudiantes con sus valores.
El currículo implícito es lo que enseña la escuela debido al tipo de lugar que es (esctructura organizacional, reglas, edificios, métodos de enseñanza).
Puede ser:
• Intencional, pero no declarado
Ejemplo 1: Cuando está celebrando un estudio bíblico entre adolescentes, su currículo explícito consiste en estudiar Juan
1. Tenemos un plan para estudiarlo.
Pero el maestro también tiene el currículo secreto de desear que los estudiantes se acerquen entre ellos y establezcan mejores relaciones.
El maestro no dice:
“Quiero que nos relacionemos más”.
Es intencional, pero no se anuncia.
Ejemplo 2: El maestro quiere que los estudiantes aprenden a estudiar la Biblia por ellos mismos.
La meta no se declara, pero el maestro se la ha fijado y su método seleccionado le ayuda a lograrla.
• No intencional, positivo,
Por ejemplo, los estudiantes de cierta escuela pueden aprender a ser puntuales o a no esperar gratificación, sencillamente por las reglas de la escuela y los hábitos que se han establecido.
• El currículo implícito puede no ser intencional y negativo.
Por ejemplo, un maestro quizá se propuso infundirle el gusto por la clase de historia, pero enseña el curso de forma tal que usted lo rechaza.
Este tipo de transferencia negativa puede ocurrir cuando los maestros adoptan métodos de enseñanza con los que les enseñaron y los transfieren sin evaluación en el plano de la educación cristiana.
Ya nos hemos referido al hecho de que nuestros métodos hablan más alto que nuestras palabras.
Según mis métodos, usted puede aprender algo que no me propuse, lo cual es bueno.
Sin embargo, esos resultados no propuestos podrían también ser negativos.
Cuando hay discrepancia entre nuestros resultados no propuestos y los métodos que seleccionamos, el resultado puede ser diferente de lo que nos propusimos.
3. Nulo
Este se refiere a lo que no nos propusimos enseñar.
Puede incluir procesos intelectuales que descuidamos o contenido o temas de áreas no incluidas en el currículo.
Quizá decida no enseñar algo acerca de cualquier otro punto de vista en teología aparte de mi propia tradición.
Estas decisiones impactan a nuestros estudiantes.
En nuestra asignación, el currículo explícito consiste en que escriba usted un plan de una lección.
El currículo secreto es que gane confianza en la enseñanza.
En cada aula tenemos un currículo explícito y otro secreto —propuesto o no.
También está presente un currículo nulo.
Si imprime todo el currículo y siempre imprime el pasaje bíblico de modo que los estudiantes nunca recurran a la Biblia misma, nunca más la abrirán ni se familiarizarán con ella porque ya tienen los pasajes a la mano.
Puede ser conveniente, pero nunca van a aprender a usar la Biblia.
Con el uso de este método, les estamos enseñando algo que no nos hemos propuesto.
Estamos tratando de enseñar que estudien la Biblia y la conozcan, pero en realidad les estamos enseñando que ni siquiera la necesitan —currículo secreto— y no les estamos enseñando cómo usarla o encontrar versículos —currículo nulo.
Este error se comete mucho con niños y adolescentes.
Cuando narra una historia bíblica a los niños, sosténgala de modo que vean y comiencen a comprender la fuente de la historia.
Piense en lo que están enseñando por ese método.
¿Es lo que en realidad se propuso?
Principios básicos de desarrollo de currículo en educación cristiana
1. En educación cristiana, nuestra vida debe estar conectada intencionalmente a la verdad bíblica.
2. La vida y la verdad casi nunca se vinculan automáticamente.
3. Siempre será un desafío vincularlas.
4. La meta es una vida cambiada, vida cristiana intencional. El conocimiento bíblico es un medio no un fin.
5. Los estudiantes necesitan interactuar unos con otros para aprendizaje efectivo.
6. El aprendizaje es primordialmente una actividad de la aplicación de la vida. Recordar la información puede ser parte de la aplicación, pero la información es el medio, no el fin.
7. El aprendizaje no es simplemente la presentación de materiales en breve, pasos fáciles, sino una interacción activa con la verdad en el contexto de la vida real.
Principios básicos de desarrollo de currículo en educación cristiana
¿Cuántos saben o conocen una plomada de albañil? Se usa en la industria de la construcción.
Se compone de un objeto pesado en un extremo de una cuerda. Por la gravedad natural, la cuerda se mantendrá firme.
La pared o parte de la construcción se erige de acuerdo con la línea de la plomada.
No se dobla para ajustarse a la forma del edificio.
En esta metáfora la construcción se refiere a nuestra vida.
La cuerda es la verdad bíblica.
No doblamos la verdad bíblica para ajustarla a nuestra vida cambiando así la verdad bíblica.
Siempre deseamos moldear nuestra vida de acuerdo con la verdad bíblica y ese es el tipo de conexión al que nos estamos refiriendo. Debe ser intencional.
No sucede sólo leyendo la Biblia ni sólo hablando de nuestra vida. Hemos de hablar sobre la forma en que se conecta la Biblia con nuestra vida y cómo ésta puede ser moldeada por la verdad bíblica.
Cuando hablamos del currículo en la iglesia local, nos referimos a conectar la vida con la verdad bíblica.
Lo mismo sucede en el caso de niños, jóvenes o adultos. Es mucho más que simple conocimiento bíblico.
Se debe enseñar conocimiento bíblico, pero sólo como un medio para un fin.
¿Cuáles pasos podemos usar para que en una lección logremos este tipo de conexión?
Estudiaremos cuatro diferentes planes o pasos.
Al dar varios ejemplos, no quiero confundirlos.
Lo hacemos así porque ustedes deben escoger su propia manera de elaborar una lección.
1. Vida—Verdad—Verdad aplicada
En este modelo comenzamos con la vida.
Luego exploramos fuentes de verdad que se relacionan con esta situación.
Hacemos la pregunta: “¿Qué dice la Biblia sobre este tema?”
Por ejemplo, la pureza sexual es una de las necesidades de los adolescentes.
Toda la cultura que les rodea e incluso muchos de sus amigos practican la inmoralidad sexual.
La tentación los acecha, pero deseamos que practiquen la pureza sexual.
Por ello decimos: “¿Qué dice la Biblia sobre todo esto?”
Mucho. Luego llevamos a los alumnos a examinar la Biblia sobre este tema.
Por ejemplo, les decimos que lean 1 Tesalonicenses 4.
Después de estudiar este pasaje, llegamos al tercer paso de la lección.
¿Cómo aplicamos esta verdad a nuestra vida?
¿Cómo ayudarnos mutuamente para cumplir con este compromiso?
En una clase de escuela dominical para adolescentes tocamos este tema y, al final de la lección, dimos a los participantes un pedazo de tela blanca con un pasaje de Hebreos inscrito en el que dice que hay que mantener puro el lecho matrimonial.
Específicamente escogimos ese material y el color para recordarles de una sábana blanca.
Todos los adolescentes colocaron aquel pedazo de tela blanca en su Biblia o en su bolso.
Algunos la colocaron en su tocador o cerca de un espejo de su recámara. De esta manera tratamos de conectar la vida con la verdad bíblica.
2. Presente—Pasado—Presente/Futuro
Esta es simplemente otra forma de ver la misma cosa.
¿Qué nos está pasando en el presente?
¿Qué hay del pasado (la revelación de Dios, la tradición de la iglesia, nuestra propia experiencia) que pueda ayudarnos a manejar esta situación en el presente?
Aplicamos la verdad al presente y la proyectamos a futuras situaciones que confrontaremos.
Verá cómo se hace la conexión.
3. Anzuelo/Libro/Ver/Tomar
El primer paso, anzuelo, es como el anzuelo de pesca.
¿Cómo captar la atención de los alumnos?
Tratamos de hablar acerca de algo en su vida que les interese o les preocupe.
Puedo iniciar un sermón hablando a los adolescentes acerca de héroes y sobre personas que conocen.
El siguiente paso es el Libro.
¿Qué dice la Biblia acerca de esta cosa en particular?
Es el estudio de las Escrituras sobre este tema o idea en particular.
Muestre el ejemplo de jóvenes de la Biblia que fueron ejemplares.
¿Qué los hizo héroes?
El tercer paso es Ver.
Pesamos lo que hemos descrito sobre nuestra vida (Anzuelo) con lo que dice la Biblia (Libro), y examinamos posibles aplicaciones de la verdad bíblica.
En mi sermón basado en un héroe, podría hablar sobre héroes míos que aún viven—incluso adolescentes que marcan la diferencia en el mundo porque son cristianos. Así se inculca en su mente la idea de adolescentes reales comunes que hacen cosas no muy comunes.
El paso final es Tomar.
¿A qué se compromete personalmente uno?
No sólo estamos hablando sobre lo que podemos hacer o de aplicaciones probables.
Tenemos que contestar la pregunta:
“¿Qué haré?”
En mi sermón desafío a los jóvenes a no encontrar héroes sino a serlo.
Uso 1 Timoteo 4:12: “Ninguno tenga en poco tu juventud, sino sé ejemplo de los creyentes en palabra, conducta, amor, espíritu, fe y pureza”.
Llegué al punto de la aplicación en forma muy personal.
Esta es la secuencia de la lección:
• Use un Anzuelo sobre un área de interés o preocupación.
• Libro—vea lo que dice la Palabra de Dios.
• Vea posibles aplicaciones de la Biblia a nuestra vida como se describen en la sección “Anzuelo”.
• Tomar—¿Qué hará usted? Respuesta o compromiso.
4. Vida—Verdad—Visión
• Vida—¿Qué está pasando en nuestra vida? Es una descripción.
• Verdad—Dios habla a través de la Biblia, la tradición, nuestra experiencia, la razón.
• Visión—¿Cómo se vería la verdad de Dios si la aplicáramos a esta situación en nuestra vida?
Estos cuatro ejemplos tienen una dirección similar.
Comenzamos con la vida, vemos la Palabra de Dios y luego cambiamos nuestra vida.
Y repetimos ese ciclo varias veces.
Estamos comenzando a desarrollar la forma en que podemos desarrollar más que el simple conocimiento de la Palabra de Dios, una conexión entre la Palabra de Dios y nuestra vida.
Al comenzar a pensar en la forma en que usted enseña y la forma en que elabora sus lecciones,
¿tiene usted un plan? ¿Sabe cómo iniciar? ¿Tiene un plan sobre cómo comparar la Biblia y la vida? ¿Tiene un plan de aplicación?
Si puede grabarse bien en su mente este plan, logrará un plan para elaborar currículo de manera que cada vez que se siente no tendrá que preguntarse dónde comenzar.
Necesitamos un plan con propósito, intencional, y a la vez que sea fácil para que otros lo aprendan.
Actividad: Anzuelo
Nota para el maestro: En nuestro experimento de campo encontramos que les fue difícil a
los alumnos comprender el paso de vida inicial de la lección, o el “anzuelo”.
Entendieron bien la razón, pero no sabían cómo hacerlo.
Cuando sus planes de lección tuvieron un primer paso de vida inadecuado o “anzuelo”, su paso final (ver y tomar) también sufrió.
Muestre lo que es el anzuelo y lo que no es (vea abajo).
Explique cada uno de estos criterios y luego permita que los alumnos, en parejas, hagan la actividad, determinando cuál es el anzuelo bueno o no.
Actividad del anzuelo
El anzuelo provee información sobre la vida de sus estudiantes.
El paso del Libro provee principios bíblicos.
El paso Ver, que puede ser tan sencillo como una pregunta, es como un juego de básculas, que pesa o contrasta la verdad en nuestra vida con lo que se enseña en las Escrituras y posibles aplicaciones.
Si su paso de anzuelo fue sólo un truco de introducción sin hacer pensar a los estudiantes sobre su vida y la descripción de la misma, no habrá nada que pesar contra la Biblia y el resto de la lección será un fracaso.
En seguida se explica lo que es el anzuelo y lo que no es.
El anzuelo
Principios básicos
1. Este es un paso de la “vida”. Los estudiantes están describiendo su vida SOBRE EL TEMA de la lección.
2. Los estudiantes deben estar ACTIVOS en pensamiento, descripción, etc.
3. Trate de enfocar este paso en las necesidades sentidas de los estudiantes.
4. “El interés conduce a la atención, pero la necesidad sentida conduce al esfuerzo” (Lois LeBar).
5. Pase de lo no amenazante a lo amenazante.
6. Use lo que los estudiantes “enseñan” durante esta sección de la lección para dirigir el resto de la lección.
Un anzuelo NO es
1. sencillamente una introducción al tema de la lección.
2. una mezcladora.
3. un repaso de una lección pasada.
4. un tiempo de petición de oración abierta.
Ideas de anzuelo
Estudiaremos estas 11 ideas y ustedes darán sus reacciones o pensamientos sobre cada una.
Agreguemos unas dos o tres más ideas ahora que han estudiado la lista.
Once ideas de anzuelos (entre 10,000 posibilidades)
1. Cada estudiante selecciona de una lista un objeto que describe su vida respecto al tema de la lección.
Deberán compartir su respuesta con el grupo y dar sus razones.
P. ej., una lección sobre crecimiento en Cristo.
Seleccione un animal de la siguiente lista: caracol, águila, leopardo, pingüino, oso, etc.
La persona podría decir: “Cuando se trata de crecer en Cristo, me siento como un oso porque he estado invernando por un tiempo”. O “Cuando se trata de crecer en Cristo, me siento como caracol porque mi adelanto va demasiado lento”.
2. Dramita inconcluso –concluya la historia usted mismo. ¿Qué haría usted?
3. Arte abstracto –haga una pintura o dibujo abstracto para mostrar cómo reacciona usted al tema, entonces explíquelo al grupo
4. Un juego con preguntas planificadas que se concentra en el tema de la lección.
5. Un panel de discusión
6. Agrúpese en la respuesta –fije un anuncio en cada pared con una de las siguientes palabras: “A veces, siempre, nunca, siempre”. Haga declaraciones y que la gente pase a “la pared” bajo la respuesta que ha escogido. Comience con declaraciones no amenazantes y pase a las que tocan el corazón mismo de la lección. Por ejemplo, en una lección sobre soledad. (1) Como o bebo algo. (2) Falto a clases. (3) Obtengo las mejores calificaciones. (4) Era muy popular en la escuela. (5) Se me dificulta hacer amigos. (6) Siento que tengo suficientes amigos. (7) Me siento solo. (8) Creo que si fuera diferente, les caería bien a más personas. (9) Me siento deprimido cuando me siento solo. (10) Me pregunto a quién le puedo confiar mis problemas. (11) Me gusta estar solo.
7. Estudio de caso –dramatización (p. ej., una junta de la iglesia o un jurado, compuesto de miembros de su clase, que debe decidir algo). Explore el criterio sobre el que basa su decisión.
8. Que los estudiantes escriban respuestas a las preguntas anónimamente en papeles pequeños. Recójalos y léalos al grupo.
9. Columna de consejo –Lea un problema que alguien ha enviado al columnista. Que cada estudiante escriba el consejo que daría sobre el problema. Recójalos y léalos al grupo.
10. Entreviste a dos o tres alumnos sobre la forma en que manejarían la situación. Puede enviar a los otros entrevistados al pasillo de modo que no oigan las respuestas el uno del otro.
11. Un paso hacia atrás –Que los estudiantes se pongan de pie al frente del salón. Deberán guardar dos o tres metros de distancia detrás de ellos. Haga declaraciones como la del número
Repaso
A manera de repaso, consulte los objetivos de aprendizaje que incluimos al principio de esta lección.
¿Puede usted ahora...
• Identificar tres currículos que enseñan las escuelas?
• Hacer una lista de principios básicos de desarrollo de currículo?
• Identificar cuatro pasos de la preparación de la lección?
• Desarrollar dos anzuelos para una lección sobre educación cristiana?
Hacia adelante
Hemos trabajado en el primer paso creando un plan instruccional—el anzuelo.
En la siguiente lección examinaremos los otros componentes del plan de la lección—Libro, Ver, Tomar.
Asignación de tareas
¿Enseñó una lección de educación cristiana en esta semana o participó como alumno en una experiencia de educación cristiana?
¿Cuál fue el punto central en la clase en la que participó “activamente”?
¿Cómo se pudo haber mejorado esa experiencia?
Resumen final
Haga dos cañas de pescar imaginarias atando un anzuelo, o clip a alguna cuerda y una varita.
Pegue a la segunda un pescado de papel como si lo hubiera pescado.
Sostenga la caña de pescar de modo que la vean todos.
Baje la caña de pescar hasta que no se vea detrás de su escritorio y tome la otra con el pescado de papel, entonces levántela para que la vean todos.
El propósito de la caña de pescar es pescar. . . y sacar peces del agua.
Cerciórese de que sus anzuelos capten la atención de sus alumnos y sáquelos a las actividades de aprendizaje.
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