Ir al contenido principal

Tránslate / Traducción

Jesús te sorprenderá.


Aportacion de: Ben Ayala
~~~~~~~~~~~~~~~~~~~
 
Jesús es el Creador de todo, Él conoce cómo es que mejor funciona lo que ha creado. 
Por ello en este versículo (Juan 15:5) nos invita a permanecer en Él y Su voluntad para dar mucho fruto.

Cuando una persona le entrega su vida a Jesús, ésta debe realizarlo sin reservas. Sometiendo sus temores e inseguridades a un plan mayor y perfecto. 
No obstante ello en ocasiones no es cómodo. Pues por irracional que parezca el ser humano en ocasiones cree saber más que Dios. 
 
Cuando un creyente se rehúsa a avanzar en la voluntad del Señor él está haciendo una declaración de no estar de acuerdo con Aquel que ha creado todo. 
 
Cada vez que un creyente rehúsa aceptar la perfecta voluntad de 
 
Dios está prescindiendo de lo mejor para su vida.

En el reino de los cielos al contrario del mundo se obtiene ganancia y crecimiento al entregarse a sí mismo. Pues cada vez que el creyente mengua Jesucristo crece en su corazón, aumentando así la vida espiritual (Juan 3:30).

Si la voluntad de Dios es buena, agradable y perfecta, entonces los creyentes deberíamos ser como niños que caen sin reservas en los brazos de su padre, como alguien que sin temor se echa a una alberca, como un trapecista temerario que tiene una red protectora o como un águila que se entrega a las corrientes térmicas de aire.

Cada vez que Dios remueva aspectos de tu vida pasada no voltees a mirarlos. 
Pues son como el barro que queda en el suelo después de que el alfarero lo remueve de la vasija. 
Si es la voluntad de Dios pasarte por pruebas para hacerte cada vez más parecido a Su Hijo, entrégate sin reservas a Él y con Su poder te sustentará y guardará de todo mal. 
El entregarte a Dios sin reservas facilita Sus procesos. 
Porque cuando en amor y mansedumbre decides llevar Su yugo éste se vuelve fácil de llevar y la carga se vuelve ligera (Mateo 11:30).

 
Existirán ocasiones en que la voluntad de Dios para tu vida será “podar tus ramas” para que lleves más fruto. 
 
En otras serás pasado por desiertos para aumentar 
tu comunión con Él. 
 
Tendrás que enfrentar gigantes. 
 
Dios se aferrará a remover algún pecado de ti. 
Y en todo esto te exhorto a que te rindas sin reservas a Él. 
 
Al hacerlo tu alma dejará de pelear y tendrás paz. 
 
Y una vez que hayas pasado por ese proceso serás más glorioso para Dios.

Entrégate sin reservas a Jesús y te sorprenderá.
~~~~~
~~~
~
 

Comentarios

NOVEDADES

"¿Debe o no, una iglesia dar el diez por ciento de las ofrendas que recibe?"

"¿Qué dice la Biblia acerca del diezmo?" Diezmar / ofrendar debe ser un gozo, una bendición.  Tristemente, casi nunca es ese el caso en la iglesia de hoy. Diezmar es un asunto con el que muchos cristianos luchan dia a dia. En muchas iglesias locales ponen demasiado énfasis en diezmar. Al mismo tiempo, muchos cristianos rehúsan someterse a la exhortación bíblica tocante a ofrendar al Señor. Diezmar es un concepto del Antiguo Testamento. El diezmo era un requisito de la ley en la cual todos los Israelitas ofrendaban al tabernáculo / templo el 10% de todo lo que ganaban y hacían crecer ( Levítico 27:30; Números 18:26; Deuteronomio 14:23; 2 Crónicas 31:5 ).  El Nuevo Testamento en ninguna parte ordena, o aún recomienda que los cristianos se sometan a un sistema legalista de diezmar.  Pablo declara que los creyentes deberían apartar una porción de sus ingresos a fin de dar soporte a la iglesia ( 1 Corintios 16:1-2 ). El Nuevo Testamento en ningún lugar señala un cierto porcent...

Eres un canal de bendición para tu prójimo

Y de hacer bien y de la ayuda mutua no os olvidéis; porque de tales sacrificios se agrada Dios. Hebreos 13:16) ¿Alguna vez te has parado a pensar en el impacto que tu vida tiene en las personas que te rodean? A menudo creemos que para marcar la diferencia necesitamos hacer grandes cosas, pero la verdad es que cada acto de amor y generosidad cuenta. Una sonrisa, una palabra de aliento o un simple gesto de ayuda pueden transformar el día de alguien. Dios nos ha llamado a ser canales de bendiciones. Él nos da talentos, recursos y oportunidades para compartir con los demás. Cuando tendemos la mano a los necesitados, reflejamos el amor de Cristo y difundimos esperanza. Nuestra vida adquiere un propósito mayor cuando dejamos de mirar solo nuestras propias necesidades y empezamos a ver a los demás con compasión. Incluso en tiempos difíciles, puedes ser un instrumento de Dios. Tal vez una palabra reconfortante tuya sea justo lo que alguien necesita escuchar. Ayudar no es solo dar algo material...

El Señor nos oye en el día de angustia

Que el Señor te oiga en momentos de angustia; que te defienda el Nombre, el Dios de Jacob. (Salmo 20:1) Cuando todo parece desmoronarse y nuestras almas están abatidas, hay una promesa que brilla como la luz en la oscuridad: el Señor nos escucha en el día de la angustia. Este breve, pero profundo versículo, revela el corazón de un Dios que no es indiferente a nuestro sufrimiento. Él no se limita a observar desde lejos, sino que inclina sus oídos al clamor sincero de quienes lo buscan. El salmista habla con certeza: «Que el Señor te oiga…». Nos reconforta saber que no estamos solos cuando el miedo llama a la puerta, cuando los planes fallan o cuando se nos acaban las fuerzas. La oración, en este contexto, no es un acto religioso vacío, sino un encuentro con el Dios vivo, que nos ayuda, nos protege y nos fortalece. Y todavía hay más: «que te defienda el Nombre, el Dios de Jacob». El nombre de Dios no es solo un título. Es una expresión de su carácter, su fidelidad, su pacto. El ...