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Mostrando entradas de diciembre, 2023

Mantén encendida la llama de la esperanza

Mantengamos firme la esperanza que profesamos, porque fiel es el que hizo la promesa. (Hebreos 10:23) Para mantener encendida una hoguera de leña, debes ponerle leña con frecuencia.  Si dejas de echarle leña al fuego, la llama perderá poco a poco su intensidad y su calor. La esperanza, como una llama, debe alimentarse para que se mantenga encendida.  Y el combustible que mantiene firme la esperanza es la Palabra de Dios.  A través de la Biblia conocemos y accedemos a las promesas del Señor, manteniéndolas encendidas en nuestro corazón. Dios es fiel en cumplir todas sus promesas, por eso debemos vivir conforme a la Palabra de Dios.  Mantenemos encendida la llama de la esperanza cuando permanecemos en las promesas del Señor a través de las Escrituras.  Cuanto más creemos y buscamos a Dios, más radiante se vuelve nuestra esperanza. ¡No permitas que se apague la llama de la esperanza!  El que prometió es fiel en cumplir todas las promesas.  Sigue creyendo, buscando y permaneciendo en su Pa

Ministerio Pastoral ( 25. El Pastor Como Administrador)

El Pastor Como Administrador. La función principal del pastor es la de desarrollar las fuerzas espirituales, mentales y sociales de la iglesia.  En cada congregación hay fuerzas en estado latente que deben ser desarrolladas por el bienestar de todos, los que las tienen y por la iglesia.  En este aspecto, el pastor es un teniente encargado de soldados.  Es su deber entrenar, organizar y discipularlos.  Si él quiere que los soldados peleen, él tiene que dirigir la batalla.  Algunos pastores diligentes delegan cargas que deben ser llevadas por gente de la iglesia.  Así el pastor queda libre para ocuparse en otras tareas.  Es mejor para los miembros también porque tienen la oportunidad de desarrollar y usar sus dones.  Uno de los vínculos más grandes en una iglesia es el sentimiento de ser colaboradores, cada uno con una tarea y una parte en la obra.  Ningún miembro debe quedar como recipiente, no más, siempre recibiendo sin nada que puede compartir.  La iglesia llega a la cumbre de la efi

Clama por tu nación

Si mi pueblo, que lleva mi nombre, se humilla y ora, y me busca y abandona su mala conducta, yo lo escucharé desde el cielo, perdonaré su pecado y restauraré su tierra. (2 Crónicas 7:14) Vivimos tiempos llenos de crisis graves y problemas de diferente índole en todo el mundo.  Hay una crisis de valores y de principios morales que va degenerando en todo tipo de corrupción, abusos de poder, juegos de influencia, criminalidad y tantos otros prejuicios sociales que hemos vivido.  El pueblo sufre las consecuencias de un problema que no es solo del gobierno sino de toda una nación muy necesitada de Cristo. ¡Es tiempo de que el pueblo de Dios se levante en clamor y arrepentimiento por sus pecados!  Que acuda a él con oración humilde y perseverante apartándose de todo lo que es malo para que el Señor intervenga con gracia y misericordia a favor de su país. ¡Comienza hoy a interceder por tu nación! Ora confesando al Señor los pecados de la nación, pidiendo que él nos perdone y nos purifique. Cl

Dios es la fuente de la verdadera belleza

Engañoso es el encanto y pasajera la belleza; la mujer que teme al Señor es digna de alabanza (Proverbios 31:30) Hoy día, la apariencia se ve como algo primordial en la sociedad.  Estar bonita y bien arreglada es casi una obligación.  Para mantenerse «en la moda» es necesario tener recursos e infelizmente, eso es algo que no todos tienen.  Tener una buena apariencia puede ser importante, pero hay un límite: la apariencia es superficial y pasajera. La belleza estética puede lograrse con recursos y productos, pero la belleza verdadera no se alcanza con dinero.  Esa belleza no viene de la hermosura, sino de las buenas acciones.  Una mujer temerosa de Dios siempre será elogiada y será una referencia para todos. El temor del Señor es el principio de la sabiduría (Proverbios 9:10) y una mujer sabia edifica su casa (Proverbios 14:1). Busca atraer los ojos de Dios y sé una referencia suya para los demás. Bella a los ojos de Dios Recuerda que la belleza es pasajera, pero la sabiduría nos hace t

Ser pacífico es ser bienaventurado

Dichosos los que trabajan por la paz, porque serán llamados hijos de Dios. (Mateo 5:9) En el evangelio de Mateo, capítulo 5, Jesús subió a lo alto de un monte y comenzó a enseñar al pueblo.  En un momento dado, Jesús habló sobre las bienaventuranzas y señaló al que promueve la paz como un bienaventurado.  En un mundo de pasiones afloradas, ser pacificador - además de ser sabio - es ser hijo de Dios. Al continuar con el sermón, Jesús habló sobre la importancia de la reconciliación.  Muchas veces, tengamos la razón o no, dar la mano es una tarea difícil.  Pero como dijo Jesús, es mejor hacer las paces lo más rápido posible, pues las consecuencias de esperar son mucho peores. Las personas están más agresivas cada día y se alteran por cualquier motivo.  Actitudes como esas pueden generar heridas y contaminarnos.  Mantén la calma, pon tus ojos en Cristo.  ¡Él es el Príncipe de Paz!  Jesús fue un pacificador en toda su trayectoria en la tierra, aun en momentos difíciles y turbulentos.  ¡Fue

Llamados hijos de Dios

¡Fíjense qué gran amor nos ha dado el Padre, que se nos llame hijos de Dios! ¡Y lo somos! El mundo no nos conoce, precisamente, porque no lo conoció a él. (1 Juan 3:1) Este versículo nos invita a considerar el profundo amor que Dios tiene por nosotros al llamarnos sus hijos.  Es un amor que trasciende cualquier comprensión humana, un amor que nos lleva a una relación íntima con el Creador del universo. Ser llamado hijo de Dios no es un título vacío: es una identidad que transforma nuestras vidas.  Significa que somos amados incondicionalmente, independientemente de nuestros defectos e imperfecciones.  Este amor es un regalo, una gracia divina que no merecemos.  Somos aceptados exactamente como somos, porque el amor de Dios es perfecto. Sin embargo, esta relación con Dios muchas veces nos convierte en extraños para el mundo.  Nuestros valores y principios pueden diferir de los de quienes no conocen a Dios.  Es posible que seamos incomprendidos, ridiculizados o incluso perseguidos a caus

Todo es posible para el que cree

¿Cómo que si puedo? Para el que cree, todo es posible. (Marcos 9:23) Dios puede hacer lo imposible por nosotros, solo debemos creer en su poder.  Todo es posible para el que cree en el poder de Dios.  Las cosas pueden cambiar cuando depositamos nuestra fe en Dios.  Para que lo imposible pueda ser una posibilidad en nuestra vida tenemos que poner nuestra fe en acción. La fe requiere una actitud y eso fue lo que aconteció en este relato de Marcos 9.  Un padre afligido le suplicó a Jesús por la sanidad de su hijo.  Él le dijo a Jesús «si puedes hacer algo».  Cristo le contesta la súplica con una pregunta «¿Cómo que si puedo?».  En otras palabras, «¿Crees que puedo hacerlo?». La respuesta del padre fue corta y eficaz: «¡Sí creo!». Y Jesús sanó a su hijo. Además de presentar el problema ante Jesús fue necesario creer de verdad.  Habla con Dios sobre tus problemas, pero cree también en su poder.  Todo es posible para el que cree. Jesús te dice hoy: «Yo puedo transformar tu vida».  ¿Lo crees?

Dios siempre añade más

Y Dios puede hacer que toda gracia abunde para ustedes, de manera que siempre, en toda circunstancia, tengan todo lo necesario, y toda buena obra abunde en ustedes. (2 Corintios 9:8) Tenemos un Dios poderoso que hace grandes cosas y es capaz de realizar maravillas en nuestra vida.  Él es capaz de abundar en gracia y de bendecirnos por encima de todas nuestras expectativas.  Dios hace más de lo que pedimos y pensamos.  Para que su poder pueda obrar tenemos que estar abiertos al mover de Dios.  Como se dice en el lenguaje popular, tenemos que "entregar el volante" de nuestra vida al Señor. Dios es quien sabe lo que es mejor para nuestras vidas.  Él es la razón y el propósito de nuestro vivir, somos sus instrumentos.  Y la realidad es que no hay nada mejor para un servidor que ser tocado por el Maestro de maestros.  Solos no somos capaces de hacer grandes cosas y permaneceremos por debajo de lo que podríamos llegar a ser. Pero si nos ponemos delante de Dios, abrimos la posibilid

Ministerio Pastoral ( 24. La Vida Social En La Iglesia)

El cultivo de la vida social en la iglesia El desarrollo de la verdadera vida cristiana en la iglesia depende mucho de las influencias sociales que forman su ambiente.  Por eso, el pastor debe intentar formarlas, en tanto que sea posible, los miembros satisfacen sus necesidades sociales adentro de la iglesia.  La iglesia no debe ser una sociedad exclusiva que no admite a los nuevos.  La vida social resulta del alto vínculo de afinidad espiritual que los une, el uno al otro y a Cristo, como iglesia.  Resulta que la iglesia es la esfera natural de las actividades del alma.  Por eso, es de suma importancia que el pastor trate de formar en la iglesia una vida social fuerte, sana y que atraiga a otras almas.  Para hacerlo tengo dos sugerencias: Debemos promover el mutuo conocimiento en la iglesia.  Debemos presentar a los desconocidos a los demás de la iglesia.  Los desconocidos deben recibir un "bien venido" enseguida, seguido por una visita en su casa por uno de los miembros.  A

No acumules ansiedad

Depositen en él toda ansiedad, porque él cuida de ustedes. (1 Pedro 5:7) La ansiedad está directamente ligada a la preocupación y al nerviosismo.  Cuando no nos sentimos confiados, la incertidumbre nos incomoda.  Solamente la Palabra de Dios es eficaz para calmar nuestro corazón. En la Biblia encontramos palabras de consuelo y de esperanza.  Todavía más que aliviar nuestras ansias, Dios quiere guiarnos por un camino de bendición.  Para eso, debemos dar el primer paso: confiar en él.  La fe aleja la incertidumbre y nos acerca a Dios. Todo aquel que busca a Cristo encuentra descanso: Vengan a mí todos ustedes que están cansados y agobiados, y yo les daré descanso.( Mateo 11:28) Alivia tu corazón, descansa en las promesas del Señor. Echando fuera la ansiedad Habla con Dios.  Pon delante de él tus pensamientos, cuéntale qué es lo que te está incomodando. Después de orar, evita seguir pensando en lo que te aflige. Busca a Dios por medio de la alabanza o leyendo la Palabra. Ten siempre en me

Jesús oró y por ti.

No ruego solo por estos. Ruego también por los que han de creer en mí por el mensaje de ellos, para que todos sean uno. Padre, así como tú estás en mí y yo en ti, permite que ellos también estén en nosotros, para que el mundo crea que tú me has enviado (Juan 17:20-21) Poco antes de que Jesús muriera en la cruz, él cenó con sus discípulos, les lavó los pies y los fortaleció en preparación a lo que iba a suceder.  En el evangelio de Juan vemos los pormenores de esas últimas lecciones y las oraciones que Jesús hizo antes de que le arrestaran. Él oró por sí mismo, por sus discípulos y por todos los creyentes del mundo.  ¡Así es! Jesús te incluyó también a ti en una de sus últimas peticiones.  Clamó por todos nosotros los que creemos en él: pidió por la unidad entre los cristianos y que todos estuvieran unidos a él y a Dios, de la misma forma en que ellos son uno.  El objetivo de esta petición era que el mundo creyese que Jesucristo vino para salvar. Sé la respuesta a la oración de Jesús: O

Dar Gracias

La gente piensa que una acción de gracias es como una fiesta, o celebración secular, y que les permite tener un descanso y disfrutar de una comida () suculenta Otros, piensan que el día de acción de gracias es el principio de las celebraciones navideñas. ¿Porqué celebramos el día de acción de gracias? “Dad gracias en todo, porque esta es la voluntad de Dios para con vosotros en Cristo Jesús” 1 Tesalonicenses 5:18 “Y todo lo que hacéis, sea de palabra o de hecho, hacedlo todo en el nombre del Señor Jesús, dando gracias a Dios Padre por medio de él”. Colosenses 3:17 “dando siempre gracias por todo al Dios y Padre, en el nombre de nuestro Señor Jesucristo”. Efesios 5:20 ¿Cómo hacer un Culto de Acción de Gracias? Elementos del culto de acción de gracias *La iglesia, el pueblo del Señor * La ofrenda que nosotros traemos para Él * Dios quien recibe nuestra ofrenda, nuestro sacrificio. En el culto del Antiguo Testamento, había un sacerdote que ofrecía un sacrificio a Dios, una ofrenda al Seño

No te canses de hacer el bien

No nos cansemos de hacer el bien, porque a su debido tiempo cosecharemos si no nos damos por vencidos. (Gálatas 6:9) ¿Nos podemos cansar de hacer el bien?  Esto puede parecer extraño, pero sí que podemos.  El mundo oprime toda buena acción que apunta hacia Cristo.  ¿Cómo lo hace?  A través de la ingratitud, el libertinaje, la injusticia y la falta de reconocimiento.  Cada vez que no recibimos la respuesta esperada al ayudar a alguien nos desmotivamos y puede que deseemos "tirar la toalla".  Mantén la calma.  Recuerda que toda recompensa es dádiva de Dios y no de los hombres.  Somos salvos por su gracia, no por nuestros actos. Cuando medimos nuestra ayuda medimos nuestras bendiciones.  Jesús hizo el mayor bien sin hacer acepción de personas ni medir esfuerzos en cuanto a quién podía ayudar.  Cuando hacemos el bien sin esperar nada a cambio hacemos lo que Jesús haría.  Él enseñó a sus discípulos a practicar el bien sin alardear con el fin de ser honrados por los demás.  que muc

No nos llevamos nada de este mundo

Tal como salió del vientre de su madre, así se irá: desnudo como vino al mundo y sin llevarse el fruto de tanto trabajo. (Eclesiastés 5:15) El versículo de Eclesiastés 5:15 nos ofrece una profunda reflexión sobre lo efímero de la vida terrenal y la inutilidad de acumular riquezas materiales.  Nos recuerda que, cuando nacemos, estamos desprovistos de cualquier posesión y, cuando dejamos este mundo, no podemos llevarnos nada de lo que hemos acumulado a lo largo de nuestra vida. Este pasaje bíblico nos hace un llamado a la humildad y a reflexionar sobre nuestras prioridades.  A menudo nos sentimos tentados a buscar la felicidad en la búsqueda incesante de riquezas, poder y éxito material.  Sin embargo, el libro de Eclesiastés nos recuerda que estas búsquedas son inútiles, ya que todo lo que logramos en esta vida es transitorio. En lugar de centrarnos en acumular bienes materiales, estamos llamados a invertir en cosas eternas, como el amor, la compasión, la bondad y la justicia.  Debemos b

Ministerio Pastoral (23. Avivamientos)

Avivamientos Se puede decir que la historia de la cristiandad es una historia de avivamientos por los cuales la obra de la redención ha avanzada entre la humanidad.  Hay razón por suponer que será así hasta el fin.  El sueño de los hombres es que el evangelio avance a un ritmo firme.  Tal pensamiento no está apoyado ni por la Biblia ni tampoco por la historia de la iglesia.  En el pasado los avivamientos han sido épocas en que el mundo cristiano había avanzado a un conocimiento más claro de la verdad divina y un nivel más alto de la experiencia cristiana. Ha sido el proceso divino por el cual el evangelio ha vencido sobre los errores y pecados de los hombres y ha encontrado un desarrollo más completo en la conciencia y la vida de la gente. El que estudia cuidadosamente la historia de la iglesia no puede menospreciar los avivamientos.  Esto no quiere decir que un pastor debe esperar tener éxito únicamente o mayormente en estas manifestaciones de poder espiritual.  Por regla general un a

Vence el dolor del abandono

Aunque mi padre y mi madre me abandonen, el Señor me recibirá en sus brazos. (Salmo 27:10) La experiencia de ser abandonado es bastante traumática para cualquier persona.  Infelizmente, hasta cierto punto la mayoría de las personas ya ha sufrido algún tipo de abandono. Existe el abandono social, condición en la que se encuentran los que están sin hogar o las personas con discapacidades.  También el abandono parental, cuando los hijos son abandonados por los padres.  Otro es el abandono familiar o dentro de las relaciones, cuando el cónyuge, novio o enamorado se aparta sin mostrar ningún tipo de interés por la otra persona.  Y está el abandono emocional, cuando existe el sentimiento de rechazo o de alejamiento por parte de alguien que antes se interesaba por uno. Sea cual sea el tipo, si esa es tu condición, recuerda que Dios te acoge en cualquier situación.  Jesucristo conoce tu dolor pues él también fue rechazado, humillado y traicionado por sus amigos más allegados.  Él sufrió en la

Dedícate a lo que importa

Se mantenían firmes en la enseñanza de los apóstoles, en la comunión, en el partimiento del pan y en la oración. (Hechos 2:42) La iglesia primitiva se enfocaba en los siguientes 4 pilares: la enseñanza apostólica, la comunión entre ellos, las comidas y las oraciones.  Visto esto, deberíamos preguntarnos cuáles son las actividades a las que nos dedicamos.  Nuestro énfasis debe ser esforzarnos en practicar estos pilares.  La enseñanza apostólica es la base de la fe del cristianismo.  La comunión es el cuerpo de Cristo unido recibiendo bendición.  Las comidas con nuestros hermanos fortalecen los vínculos y sirven para dar a aquellos que no tienen.  Y las oraciones nos conectan directamente con Dios. La iglesia primitiva fue muy bendecida porque se dedicó a esas acciones, ya que amaban a Dios por encima de todo y se amaban los unos a los otros.  ¿Qué te mueve a hacer tu amor por Dios?  ¿Tiene algún resultado tu amor por tu prójimo?  ¡Sigue el ejemplo de la iglesia primitiva! ¡Dedícate! Est

Dios crece cuando mi yo disminuye

A él le toca crecer, y a mí menguar. (Juan 3:30) Es normal que el ser humano tenga el deseo de triunfar.  Ahora, cuando buscamos hacer la voluntad de Dios, nuestro deseo personal debe pasar al segundo plano.  En la obra de Dios lo principal es su reino. Por eso, cuando ayudamos en la obra de Dios, nuestra voluntad debe menguar. Buscar el reino de Dios no es una carrera en busca del éxito, sino una misión en la que se nos exige entrega.  Justamente cuando nos entregamos a la voluntad de Dios, él nos sorprende y nos bendice más y más.  Cuando menguamos, Dios crece en nuestra vida y su presencia nos satisface. Menguar no quiere decir que sucumbiremos.  Todo lo contrario.  Cuando dejamos de lado nuestra voluntad atraemos los ojos de Dios y recibimos su protección. Coloca a Dios en primer lugar. Dedícate a hacer la voluntad de Dios y él te sorprenderá. Recuerda que nuestro crecimiento debe servir para que el nombre de Jesús se engrandezca. Sé voluntario en tu iglesia local.  Ayuda al crecim

Confía en Dios en los momentos difíciles (reflexión)

¿En qué o en quién confías cuando la vida se pone difícil? ¿En tu familia y amigos? ¿En tus propias fuerzas? ¿En el gobierno? ¿Dónde depositas tu confianza? Dios es el único digno de toda confianza. Sin embargo, a veces lo culpamos a él de nuestros problemas. Olvidamos que muchas de las cosas que nos suceden son consecuencia de nuestros propios errores, o simple y sencillamente una muestra de que vivimos en un mundo caído e imperfecto. En este mundo tendremos aflicciones, pero debemos seguir confiando en Jesús porque él ya venció al mundo (Juan 16:33). ¿Cómo mantener viva la confianza en Dios? Para que no desfallezcas y sigas confiando en Dios, es importante que te aferres a él en medio de la dificultad. En lugar de permitir que tu dolor o tus temores te dominen y endurezcan tu corazón, acércate más a Dios y lleva tus cargas ante él. Recuerda que sirves al Dios todopoderoso que te ama y te cuida. Nada de lo que te sucede sorprende a Dios y puedes estar seguro de que él tiene el control

Ministerio Pastoral (22. La Visitación Pastoral)

La Visitación Pastoral El cuidado de las almas es la principal obra del pastor.  El pastor es el encargado de un rebaño.  Es su deber guiar, apacentar y defender a su rebaño.  El mandato divino es; "Por tanto, mirad por vosotros, y por el rebaño en que el Espíritu Santo os ha puesto por obispos, para apacentar la iglesia del Señor, la cual él ganó por su propia sangre." (Hechos 20:28)  Es para que él, sea guía personal, espiritual y un amigo cristiano digno de toda confianza.  Nuestro señor dijo, al describir al buen pastor, "Las ovejas oyen su voz; y a sus ovejas llama por nombre, y las saca. Y cuando ha sacado fuera todas las propias, va delante de ellas; y las ovejas le siguen, porque conocen su voz." (Juan 10:3-4)  Cada miembro de su rebaño es un alma encargada a su cuidado por el Señor y, si él es digno de la confianza puesta en él, él será uno de los que velan por las almas como quien ha de dar cuenta. (Heb. 13:17) Pablo, cuando estaba en Éfeso, enseñaba públi