Ir al contenido principal

Tránslate / Traducción

Escoge perdonar


En la vida, somos llamados a reflejar la gracia de Dios en nuestras relaciones. En Colosenses 3:13, se enfatiza la importancia del perdón, un regalo que el Señor nos da en abundancia. Así como recibimos ese perdón incondicional, tenemos el desafío de extenderlo a los demás.

Sean mutuamente tolerantes. Si alguno tiene una queja contra otro, perdónense de la misma manera que Cristo los perdonó. (Colosenses 3:13)

Al soportarnos unos a otros, abrimos espacio para que florezca la compasión. En tiempos de conflicto, la paciencia se convierte en nuestra armadura y el amor en nuestro escudo. El perdón, entonces, se revela como el elixir que cura las heridas del corazón y de la mente.

Cada vez que perdonamos, mostramos que la gracia de Dios está presente en nuestras vidas. No se trata solo de dejar ir el dolor, sino también de mostrar el amor que va más allá de nuestros errores. Así como Dios nos mira con misericordia, nosotros debemos mirar a nuestros hermanos con ojos de perdón.

Porque si perdonan a otros sus ofensas, también los perdonará a ustedes su Padre celestial. (Mateo 6:14)

Busquemos que nuestra forma de vivir muestre cómo el perdón puede transformarlo todo, difundiendo el amor de Dios. Cuando perdonamos, experimentamos la verdadera libertad que proviene de la gracia de Dios. Que en toda relación, el perdón nos guíe hacia la reconciliación y el amor del Padre.

Elige perdonar

Desarrolla la paciencia para soportar los fracasos de los demás, dando tiempo para que los resentimientos se sanen y que se abra espacio para la compasión.

Adopta una perspectiva misericordiosa, así como Dios nos mira, reconociendo que todos cometemos errores y merecemos perdón.

Demuestra perdón a través de acciones amorosas, construyendo puentes de reconciliación e irradiando la luz del amor divino en tus interacciones.

Para orar:

Señor, concédeme la paciencia para soportar los fracasos ajenos, dando tiempo para que la tristeza sane. Ayúdame a ver a los demás con misericordia, así como tú me miras, reconociendo que todos necesitamos de tu perdón. Permíteme actuar con amor práctico, construyendo puentes de reconciliación e irradiando tu luz en cada interacción. Amén.

Comentarios

NOVEDADES

LA UNIDAD DE EL CRISTIANO: Estudio Bíblico

¿CON QUÉ AUTORDAD? “Mas no ruego sólo por estos, sino también por los que han de creer en mi por la palabra de ellos, para que todos sean uno. Como tu, oh Padre, estas en mi y yo en ti, que también ellos estén en nosotros, para que el mundo crea que tu me enviaste” ( Hechos 17:20-21 , LBLA). INTRODUCCIÓN Este pasaje del evangelio según Juan capitulo 17:20-21 muestra claramente cuál es la voluntad de Dios en cuanto a la clase de unidad que Dios desea de los creyentes. Animo a todos los lectores a que presten mucha atención a este tema ya que es uno de mucha importancia. Les animo a que practiquen los siguientes tres pasajes Bíblicos ( Hechos 17:11; 1 Tesalonicenses 5:21 & 1 Juan 4:1 ). Espero que después que haya leído estos pasajes usted crea lo que dice la Biblia y no lo que yo digo. Lo que siempre debe de importarnos es lo que dice Dios y no lo que los hombres, y sus doctrinas enseñan. La unidad del cristiano es un tema muy importante a considerar. Dios desea que Su pueblo este...

No le des la espalda a Dios, por tu propio bien!

No te expongas al peligro, por tu propia voluntad Muchos sabemos lo que es estar en una situación difícil, cuesta arriba  o en una pendiente muy inclinada y resbaladiza, ya sea por agua, lodo,  hielo o cascajo suelto. Hace años atrás, hablaba con un amigo y hermano en cristo, acerca de las entonces dificultades y obstáculos que un cristiano suele enfrentar en su diario vivir. Cuando alguien usa estas palabras  «estoy en una situación difícil y no quiero fallarle a Dios»  para tratar de evitar un paso en falso, aunque sea pequeño, en una dirección peligrosa, entendemos muy bien la advertencia. Sentimos ansiedad por una decisión que, de pronto, podría colocarnos en un terreno perjudicial (peligroso). Muchos también sabemos que la Biblia describe los caminos resbaladizos en los que terminamos cuando deliberadamente le damos la espalda a Dios. El profeta Jeremías se refiere a aquellos que voluntariamente ignoran el peligro real, la palabra d...

No confundas los desafíos con derrotas

Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo. (Juan 16:33) En la vida es común enfrentar momentos en los que todo parece desmoronarse. Las puertas se cierran, soplan vientos contrarios y el alma se siente abatida. En momentos así, muchos confunden el desafío con la derrota. Pero es importante entender que el desafío es una parte esencial del crecimiento, no el final del viaje. Los desafíos nos moldean, nos fortalecen y nos acercan a Dios. Nos enseñan a confiar más, a orar con más fervor y a depender completamente de la gracia de Dios. Cuando David se enfrentó a Goliat, fue un desafío, no una derrota. Cuando José fue vendido por sus hermanos y arrojado a la cárcel, fue un proceso, no el final de la historia. Dios nunca prometió una ausencia de luchas, pero garantizó su presencia constante en medio de ellas. Él convierte el desierto en un camino y el dolor en un propósito. Si hoy estás enfrentando algo difícil,...