Ir al contenido principal

Tránslate / Traducción

Fe auténtica


En el caminar cristiano, es importante no quedarse estancado como los fariseos. Ellos se centraron demasiado en seguir reglas olvidando lo que realmente importa en el evangelio. Ser cristiano no se trata solo de cumplir los mandamientos: se trata de cambiar por dentro, de madurar en la fe.

Necesitamos ser sinceros en nuestra fe, sin pretender ser algo que no somos. Los fariseos fueron criticados por parecer buenos por fuera, pero eran diferentes por dentro. Debemos buscar una fe verdadera, sin falsedad.

Otro punto es ser compasivo, es decir, preocuparse por los demás. Jesús criticó a los fariseos porque no les importaban las personas, solo las reglas. El evangelio trata sobre el amor y la compasión. Debemos ser amables, ayudar a los demás y mostrar el amor de Cristo.

Mantener la humildad también es importante. Los fariseos estaban orgullosos y se creían mejores que los demás. Necesitamos recordar que todos dependemos de la ayuda de Dios. No debemos pensar en nosotros mismos como superiores, sino reconocer que necesitamos la ayuda divina.

En resumen, para no ser como los fariseos, debemos ser auténticos en nuestra fe, ser amables con los demás y mantener la humildad, recordando que todos dependemos de la ayuda de Dios. De esta manera, podemos vivir verdaderamente el evangelio.

Vive el evangelio de verdad

Cultiva una fe auténtica: da prioridad a desarrollar una relación íntima con Dios, yendo más allá de las prácticas religiosas superficiales, buscando una transformación sincera del corazón.

Practica la compasión: muestra amor por los demás, priorizando la empatía, reflejando el cuidado y la misericordia presentes en el mensaje del evangelio de Jesús.

Mantén la humildad: reconoce tu dependencia de Dios, evitando el orgullo. Admite tus fracasos, buscando constantemente crecer en la fe con humildad y gratitud.

Para orar:

Señor, ayúdame a cultivar la fe auténtica. Que pueda practicar la compasión, reflejando tu amor. Mantenme humilde, reconociendo mi dependencia de ti. Que mi vida revele el verdadero significado del evangelio. En el nombre de Jesús, amén.

Comentarios

NOVEDADES

Caminando con Cristo

Muchas veces, en nuestro caminar con Dios, podemos sentir que todavía estamos lejos de ser perfectos. Nos enfrentamos a luchas, fracasos y momentos en los que pensamos que no estamos progresando como nos gustaría.  Pero el apóstol Pablo nos recuerda en Filipenses 3:12-14 que no importa cuán imperfectos seamos o cuántos errores hayamos cometido en el pasado, Dios nos llama a seguir adelante. No que lo haya alcanzado ya, ni que ya sea perfecto; sino que prosigo, por ver si logro asir aquello para lo cual fui también asido por Cristo Jesús. Hermanos, yo mismo no pretendo haberlo ya alcanzado; pero una cosa hago: olvidando ciertamente lo que queda atrás, y extendiéndome a lo que está delante, prosigo a la meta, al premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús. (Filipenses 3:12-14) No necesitamos quedarnos estancados en el pasado. En Cristo, tenemos una nueva oportunidad cada día. Lo más importante es seguir avanzando, manteniendo siempre la mirada fija en el objetivo, que es n...

Dios puede animar tu día

Hoy compartimos una verdad transformadora: el poder de Dios es capaz de animar tu vida diaria. En medio de la adversidad, es reconfortante saber que tenemos un Dios que está siempre a nuestro lado, dispuesto a fortalecernos y animarnos. La Palabra de Dios asegura en Isaías 41:10: Así que no temas, porque yo estoy contigo; no te angusties, porque yo soy tu Dios. Te fortaleceré y te ayudaré; te sostendré con mi diestra victoriosa. (Isaías 41:10) Es una promesa fortalecedora que muestra que Dios no solo está con nosotros, sino que también nos permite vencer los desafíos. Cuando el día se sienta pesado, recuerda Filipenses 4:13: "Todo lo puedo en Cristo que me fortalece". No nos enfrentamos solos a los desafíos: el Señor nos acompaña y nos capacita para superar cualquier situación. Además, cada mañana la misericordia de Dios es nueva (Lamentaciones 3:22-23), brindándonos un nuevo día lleno de oportunidades para experimentar el amor y el aliento divinos. Por tanto, deja tu día en ...

Con Cristo, todo el año es un año nuevo

Hermanos, no pienso que yo mismo lo haya logrado ya. Más bien, una cosa hago: olvidando lo que queda atrás y esforzándome por alcanzar lo que está delante, sigo avanzando hacia la meta para ganar el premio que Dios ofrece mediante su llamamiento celestial en Cristo Jesús. (Filipenses 3:13-14) El final del año es por lo general un momento de conmemoración, aunque no para todos. Para algunas personas pensar en el próximo año puede causar desánimo: "da igual, todos los años son iguales". No todos actúan de la misma manera ante la expectativa de un año nuevo. La mejor manera de romper con el desánimo es ser sincero con Dios. No hay nada mejor que abrir el corazón y exponer tus expectativas antes del "cambio de año". Dios es misericordioso, él nos oye, y es eso lo que desea que hagamos. Solo el Espíritu Santo es capaz de calmarnos y de confortarnos. ¡Permítele que lo haga! Sé sincero contigo y reconoce todo lo que Dios ha hecho en tu vida. Desarrollar un corazón agradeci...