Porque a ustedes se les ha concedido no solo creer en Cristo, sino también sufrir por él. (Filipenses 1:29) Cuando atravesamos dificultades y pruebas, en esos momentos difíciles en los que nada parece salir bien y todo lo que nos rodea nos desafía, debemos recordar este pequeño y poderoso versículo. Este versículo habla de dos grandes privilegios, creer y sufrir. Primero, recuerda que creer en Cristo es un privilegio. En medio del dolor, aférrate firmemente a la fe en el salvador de tu alma, en aquel que padeció la muerte en tu lugar y te abrió un camino nuevo y vivo. Cristo es tu consolador, acércate a él en oración para buscar las respuestas a tus problemas. Segundo, sufrir por Cristo es un tremendo privilegio. Él sufrió nuestra muerte y ahora debemos vivir su vida. Cuando sufrimos, ¡sufrimos como el cuerpo de Cristo! ¡Compartimos su dolor hoy y mañana compartiremos su gloria! Y todo esto, por gracia. No lo merecemos, sino que es un privilegio. Busca respuestas y agradece ¡Busca en e...
Centro Misionero De Cristo Para Las Naciones. On Line... Comunidad Santa Fe, El Guarumal, Lourdes Colon, La Libertad, El Salvador. Enseñar, discipular, y capacitar. Sin almas ganadas, no hay nadie para enseñar.