- Isaías 26:4
Últimamente se habla mucho sobre la inestabilidad o el riesgo que ésta puede causar. Las personas y los sistemas atraviesan problemas constantes de inestabilidad en las relaciones comerciales entre países, las decisiones políticas y financieras, las alteraciones climáticas y geológicas, y hasta a nivel familiar o psicológico.
Algunas de esas oscilaciones pueden dejar un rastro bastante destructivo en regiones asoladas por sismos o tsunamis, por ejemplo.
A pesar de todas las variaciones e incertidumbres que pueden acechar nuestras vidas, hay por lo menos un aspecto en el que podemos tener una firme esperanza:
¡Dios es una roca inamovible!
Todo lo demás puede sufrir alteraciones y cambios causados muchas veces por la acción inconsecuente y desastrosa del ser humano.
Pero Dios y su Palabra permanecen firmes para siempre.
Encuentra tu seguridad eterna en Jesús:
Ora y pon tu vida enteramente sobre el fundamento firme que es el Señor.
Confía que Dios es tu roca eterna, entrégale todas las ansiedades y cree que él cuida de ti.
Busca orientación en la Palabra de Dios para tus planes, tus sueños y tu familia.
Comparte con otras personas la estabilidad de la roca eterna que es Cristo.
Para orar:
Señor Dios, tú eres mi roca eterna.
Gracias por sustentar mi vida todos los días.
Ayúdame a mantener la fe firme en ti y que mi corazón sea renovado por tu Palabra.
Que mi familia, amigos y todos los que sufren con las incertidumbres de este mundo puedan también conocerte y afirmarse en tu amor.
En el nombre de Jesús, amén.
Comentarios
Publicar un comentario