Ir al contenido principal

Tránslate / Traducción

GRACIAS







G

r

a

c

i

a

s






by Anne Cetas

When I visited Mexico, I wished I knew how to speak Spanish. I could say gracias (thank you), muy bien (very good), and hola (hello).

But that was about it.

I grew tired of just saying gracias to everyone who talked with me or did something for me.

But we should never grow tired

of giving words of thanks to God.

David knew the importance of saying thanks. After he became king over Israel and had a tent constructed to house the ark of the covenant (where God’s presence dwelt), he appointed some of the Levites “to commemorate, to thank, and to praise the Lord (1 Chron. 16:4). Many people remained there to offer sacrifices and give thanks to God daily (vv.37-38).

gracias


David also committed to Asaph and his associates a song of thanks (1 Chron. 16:8-36).

His psalm gave thanks for what the Lord had done: His deeds among the peoples (v.8), “His wondrous works” (v.9), “His wonders, and the judgments of His mouth” (v.12), and His “salvation” (v.35).

David’s song also gave praise for who the Lord was:
good, merciful, and holy (vv.34-35).




Read:
 
1 Chronicles 16:7-10,
23-36



( 1 Chronicles 16-Audio-)
   













Oh, give thanks to the Lord! —1 Chronicles 16:8


Like David, we should never grow tired of sayinggracias to God for who He is and for all He’s done for us. Take time today to offer your sacrifice of praise to Him.
1chronicles16

Praise, my soul, the King of heaven, To His feet thy tribute bring; Ransomed, healed, restored, forgiven, Evermore His praises sing. —Lyte
The heart filled with praise brings pleasure to God.






Bible in a Year:
Joshua 13-15; Luke 1:57-80


"Reflexions from Our Daily Bread"
Posted by: Ben Ayala :  benayalal@gmail.com email
Thanks to the Sources at: rbc[dot]org  -and- odb[dot]org
fbFollow Pastor Tony at:
www.facebook.com/roberto.bonillacea
YouTube                                                                                       googleplus






Comentarios

NOVEDADES

¿Qué debo hacer cuando no logro entender?

Lo secreto le pertenece al Señor nuestro Dios, pero lo revelado nos pertenece a nosotros y a nuestros hijos para siempre, para que obedezcamos todas las palabras de esta ley. (Deuteronomio 29:29) Moisés llegaba al final de su vida. Él estaba consciente de que moriría poco después sin lograr entrar a la "Tierra Prometida". En sus últimas palabras para el pueblo de Israel, él afirmó que existen cosas encubiertas para nosotros. Son cosas que no entenderemos jamás en esta vida, pues huyen a nuestra comprensión humana. Hay tres actitudes que nos pueden ayudar a lidiar con lo que no logramos entender: Confianza - Aun cuando no entendamos lo que sucede, podemos confiar en el Señor, pues sabemos que él conoce lo que es mejor para nosotros. Obediencia - No necesitamos entender para obedecer. La confianza nos lleva a obedecer aunque no entendamos todo. Humildad - Obedecer sin comprender, también exige humildad. La humildad nos ayudará a aceptar aquello que no entendemos. Confía y obede...

"¿Debe o no, una iglesia dar el diez por ciento de las ofrendas que recibe?"

"¿Qué dice la Biblia acerca del diezmo?" Diezmar / ofrendar debe ser un gozo, una bendición.  Tristemente, casi nunca es ese el caso en la iglesia de hoy. Diezmar es un asunto con el que muchos cristianos luchan dia a dia. En muchas iglesias locales ponen demasiado énfasis en diezmar. Al mismo tiempo, muchos cristianos rehúsan someterse a la exhortación bíblica tocante a ofrendar al Señor. Diezmar es un concepto del Antiguo Testamento. El diezmo era un requisito de la ley en la cual todos los Israelitas ofrendaban al tabernáculo / templo el 10% de todo lo que ganaban y hacían crecer ( Levítico 27:30; Números 18:26; Deuteronomio 14:23; 2 Crónicas 31:5 ).  El Nuevo Testamento en ninguna parte ordena, o aún recomienda que los cristianos se sometan a un sistema legalista de diezmar.  Pablo declara que los creyentes deberían apartar una porción de sus ingresos a fin de dar soporte a la iglesia ( 1 Corintios 16:1-2 ). El Nuevo Testamento en ningún lugar señala un cierto porcent...

Eres un canal de bendición para tu prójimo

Y de hacer bien y de la ayuda mutua no os olvidéis; porque de tales sacrificios se agrada Dios. Hebreos 13:16) ¿Alguna vez te has parado a pensar en el impacto que tu vida tiene en las personas que te rodean? A menudo creemos que para marcar la diferencia necesitamos hacer grandes cosas, pero la verdad es que cada acto de amor y generosidad cuenta. Una sonrisa, una palabra de aliento o un simple gesto de ayuda pueden transformar el día de alguien. Dios nos ha llamado a ser canales de bendiciones. Él nos da talentos, recursos y oportunidades para compartir con los demás. Cuando tendemos la mano a los necesitados, reflejamos el amor de Cristo y difundimos esperanza. Nuestra vida adquiere un propósito mayor cuando dejamos de mirar solo nuestras propias necesidades y empezamos a ver a los demás con compasión. Incluso en tiempos difíciles, puedes ser un instrumento de Dios. Tal vez una palabra reconfortante tuya sea justo lo que alguien necesita escuchar. Ayudar no es solo dar algo material...