Ir al contenido principal

Tránslate / Traducción

Is it time for your checkup?









Time

 For

 A

 Checkup

 







by Bill Crowder

Every year I have a physical—that periodic visit to the doctor’s office where I’m poked and prodded, screened and studied. It is something that can be easy to dread, and even to fear. We aren’t sure what the tests will show or what the doctors will say. Still, we know that we need this evaluation to understand our physical well-being and what is needed as we move forward.

office


The same is true spiritually in the life of the Christ-follower. We need to pause from time to time and reflect on the condition of our hearts and lives.

One place for an important self-study is at the Lord’s Table. Paul wrote to the Corinthians, some of whom were eating in an unworthy manner: “Let a man examine himself, and so let him eat of the bread and drink of the cup” (1 Cor. 11:28). In the remembrance of Christ’s death for us, there can be a sobering clarity of thought and understanding, for as we consider the price Jesus paid for us, it is the best time to consider the condition of our heart and our relationships. Then, with honest understanding of our spiritual well-being, we can turn to Him for the grace we need to move forward in His name.









Read: 1 Corinthians 11:27-29


( 1 Corinthians - 11 -Audio-)
   

















Let a man examine himself, and so let him eat of the bread and drink of the cup. 1 Corinthians 11:284


Is it time for your checkup?


By God’s grace, may we be known for it.
communion
Search me, O God, my heart discern; Try me, my inmost thoughts to learn. Help me to keep from sin, I pray, Guarding my mind throughout this day. —Anon.  
  Self-examination is one test from which no Christian is excused.










Bible in a Year:
Judges 19-21; Luke 7:31-50


"Reflexions from Our Daily Bread"
Posted by: Ben Ayala :  benayalal@gmail.com email
Thanks to the Sources at: rbc[dot]org  -and- odb[dot]org
fbFollow Pastor Tony at:
www.facebook.com/roberto.bonillacea
YouTube                                                                                       googleplus










Comentarios

NOVEDADES

¿Qué debo hacer cuando no logro entender?

Lo secreto le pertenece al Señor nuestro Dios, pero lo revelado nos pertenece a nosotros y a nuestros hijos para siempre, para que obedezcamos todas las palabras de esta ley. (Deuteronomio 29:29) Moisés llegaba al final de su vida. Él estaba consciente de que moriría poco después sin lograr entrar a la "Tierra Prometida". En sus últimas palabras para el pueblo de Israel, él afirmó que existen cosas encubiertas para nosotros. Son cosas que no entenderemos jamás en esta vida, pues huyen a nuestra comprensión humana. Hay tres actitudes que nos pueden ayudar a lidiar con lo que no logramos entender: Confianza - Aun cuando no entendamos lo que sucede, podemos confiar en el Señor, pues sabemos que él conoce lo que es mejor para nosotros. Obediencia - No necesitamos entender para obedecer. La confianza nos lleva a obedecer aunque no entendamos todo. Humildad - Obedecer sin comprender, también exige humildad. La humildad nos ayudará a aceptar aquello que no entendemos. Confía y obede...

¿Siervo o Señor?

Porque, ¿quién es más importante, el que está a la mesa o el que sirve? ¿No lo es el que está sentado a la mesa? Sin embargo, yo estoy entre ustedes como uno que sirve. (Lucas 22:27)  El más importante entre ustedes será siervo de los demás. (Mateo 23:11)  ¿Qué prefieres: servir o ser servido? Probablemente, muchos contestaríamos que nos gustaría ser servidos. Tal vez estemos cansados de las muchas tareas diarias y deseosos de tener un momento de relax en el que otra persona nos sirva mientras descansamos. Sí, está bien recibir cosas buenas, pero no es bueno que nos enfoquemos en eso. El problema real reside en que lleguemos a considerar a Dios como un recadero que debe estar siempre listo para traer lo que solicitamos...  Alguien dijo una vez que «quien no vive para servir no sirve para vivir». El hecho es que servir es un acto de dar. Con las actividades diarias, durante nuestro trabajo, con actitudes de gentileza y con buenas acciones, servimos y somos servidos.  ...

Conectado con Dios

En el mundo acelerado en el que vivimos, es fácil quedar atrapado en las redes sociales, los juegos, la música y todas las distracciones que nos ofrece la vida moderna.  Pero como cristianos, es esencial que recordemos este versículo: Clama a mí y te responderé; te daré a conocer cosas grandes e inaccesibles que tú no sabes. (Jeremías 33:3) La tecnología nos permite estar conectados con el mundo, pero a veces nos olvidamos de conectarnos con Dios. Él siempre está dispuesto a escuchar nuestras oraciones, responder nuestras preguntas y revelarnos maravillas que van más allá del entendimiento humano. La oración es nuestra conexión directa con Dios. Conectarnos con Dios no significa abandonar nuestra vida cotidiana, sino que lo incluimos en todos los aspectos de la misma. Al comenzar el día con oración, dar gracias por sus bendiciones, buscar su guía en tiempos de duda y compartir su mensaje de amor y esperanza con los demás, estamos verdaderamente conectados con Dios. A medida que bus...