Ir al contenido principal

Tránslate / Traducción

The "Overflow"

tbm Missions template for ben ayala entries







 The

 O

v

e

r

f

l

o

w

 



by 
Joyful shouts filtered into our house from outside and I wanted to know what was so wonderful out there. I peeked through the curtains and watched two young boys splashing in a thick stream of water that gushed from a fire hydrant.
The overflow reminded me of how God pours out blessings on His children, and how important it is to recognize that “the Lord . . . daily loads us with benefits” (Ps. 68:19).


psalm103












Read:

Psalm 103:1-10


Although I know He has furnished countless good things for me, when the car blows a gasket, when the flu infects my family, and when relationships threaten to unravel, dissatisfaction threatens my view of God’s blessings—they seem more like infrequent drips from a faucet rather than a flood of water from a hydrant!

Maybe that’s why in Psalm 103 David reminds us to “forget not all His benefits” (v.2). And then, to help us, he lists a torrent of blessings for believers. He reminds us that God forgives all our iniquities, heals all our diseases, redeems our lives from destruction, crowns us with lovingkindness, and satisfies our mouths with good things (vv.3-5).

(Psalm 103-Audio-)
   










Forget not all His benefits. —
Psalm 103:2


Today, let’s take time to acknowledge God’s abundance instead of overlooking the overflow of His blessings.

We’re loaded with benefits daily,
Sent down from the Father above;
His mercies and blessings abounding
Are gifts of His marvelous love. —Anon.
Adding up your blessings will multiply your joy.

blessthelord




Bible in a Year:
Deut.
14-16; Mark 12:28-44


"Reflexions from Our Daily Bread"
Posted by: Ben Ayala :  benayalal@gmail.com email
Thanks to the Sources at: rbc[dot]org  -and- odb[dot]org
fbFollow Pastor Tony at:
www.facebook.com/roberto.bonillacea
YouTube                                                                                       googleplus






Comentarios

NOVEDADES

Caminando con Cristo

Muchas veces, en nuestro caminar con Dios, podemos sentir que todavía estamos lejos de ser perfectos. Nos enfrentamos a luchas, fracasos y momentos en los que pensamos que no estamos progresando como nos gustaría.  Pero el apóstol Pablo nos recuerda en Filipenses 3:12-14 que no importa cuán imperfectos seamos o cuántos errores hayamos cometido en el pasado, Dios nos llama a seguir adelante. No que lo haya alcanzado ya, ni que ya sea perfecto; sino que prosigo, por ver si logro asir aquello para lo cual fui también asido por Cristo Jesús. Hermanos, yo mismo no pretendo haberlo ya alcanzado; pero una cosa hago: olvidando ciertamente lo que queda atrás, y extendiéndome a lo que está delante, prosigo a la meta, al premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús. (Filipenses 3:12-14) No necesitamos quedarnos estancados en el pasado. En Cristo, tenemos una nueva oportunidad cada día. Lo más importante es seguir avanzando, manteniendo siempre la mirada fija en el objetivo, que es n...

No confundas los desafíos con derrotas

Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo. (Juan 16:33) En la vida es común enfrentar momentos en los que todo parece desmoronarse. Las puertas se cierran, soplan vientos contrarios y el alma se siente abatida. En momentos así, muchos confunden el desafío con la derrota. Pero es importante entender que el desafío es una parte esencial del crecimiento, no el final del viaje. Los desafíos nos moldean, nos fortalecen y nos acercan a Dios. Nos enseñan a confiar más, a orar con más fervor y a depender completamente de la gracia de Dios. Cuando David se enfrentó a Goliat, fue un desafío, no una derrota. Cuando José fue vendido por sus hermanos y arrojado a la cárcel, fue un proceso, no el final de la historia. Dios nunca prometió una ausencia de luchas, pero garantizó su presencia constante en medio de ellas. Él convierte el desierto en un camino y el dolor en un propósito. Si hoy estás enfrentando algo difícil,...

Con Cristo, todo el año es un año nuevo

Hermanos, no pienso que yo mismo lo haya logrado ya. Más bien, una cosa hago: olvidando lo que queda atrás y esforzándome por alcanzar lo que está delante, sigo avanzando hacia la meta para ganar el premio que Dios ofrece mediante su llamamiento celestial en Cristo Jesús. (Filipenses 3:13-14) El final del año es por lo general un momento de conmemoración, aunque no para todos. Para algunas personas pensar en el próximo año puede causar desánimo: "da igual, todos los años son iguales". No todos actúan de la misma manera ante la expectativa de un año nuevo. La mejor manera de romper con el desánimo es ser sincero con Dios. No hay nada mejor que abrir el corazón y exponer tus expectativas antes del "cambio de año". Dios es misericordioso, él nos oye, y es eso lo que desea que hagamos. Solo el Espíritu Santo es capaz de calmarnos y de confortarnos. ¡Permítele que lo haga! Sé sincero contigo y reconoce todo lo que Dios ha hecho en tu vida. Desarrollar un corazón agradeci...