Ir al contenido principal

Tránslate / Traducción

Ponte manos a la obra

Porque somos hechura de Dios, creados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios dispuso de antemano a fin de que las pongamos en práctica. (Efesios 2:10)

Nuestros corazones desean, más que nada, una manera de justificarnos ante Dios. 

Sabemos, en el fondo, que algo anda mal en nuestra relación con él y ese problema se llama pecado. 

En esta búsqueda de volver a conectar con Dios, la primera solución que nos viene a la mente es hacer algún tipo de trabajo o sacrificio para que Dios nos acepte nuevamente.

Aunque esta es una conclusión fácil de alcanzar, además de inútil, es completamente errónea. 

En este texto, Pablo deja claro que nuestra relación con Dios ocurre única y exclusivamente a través de la gracia de Dios.

Esto significa que nuestras obras y sacrificios no sirven para encontrar el favor de Dios ni para reconciliarnos con él. 

Sin embargo, el apóstol no dice que las obras sean inútiles. 

De hecho, las obras son centrales en la vida cristiana y lo son, porque Dios las planeó en nuestras vidas desde antes de que fuéramos creados.

Así que, ningún trabajo te garantiza nada ante Dios. 

Pero desde la eternidad, Dios preparó obras para que las lleves a cabo. 

Ama al prójimo, ora fervientemente, cuida a los necesitados, lee la Palabra. 

Son obras preparadas desde antes para que las practiques. 

¡Todo lo que necesitas de Dios ya te ha sido dado por gracia!

Es hora de que te pongas manos a la obra.

¿Estás tratando de justificarte ante Dios? 

¡Reconoce ahora que la gracia de Dios es la única manera que tienes de agradarle!

No te quedes quieto, hay mucho trabajo por hacer. 

Ama, reconoce, ayuda y anima a tu prójimo.

Comparte la gracia de Dios con los demás.


Para orar:

Señor Jesús, te doy gracias, porque a través de ti puedo disfrutar de la gracia divina. 

Ayúdame a entrar, cada día, en la poderosa presencia de Dios, y que allí encuentre toda mi alegría. 

En tu nombre, Jesús, ¡amén!

Comentarios

NOVEDADES

¿Quien fue el hombre que mientras mentia Dios estaba con él y cuando dijo la verdad Dios se aparto de él?

Libro de Jueces : La historia de Sansón y Dalila. (Jueces 16:13 mentira, v. 17 dijo la verdad y v. 20 Dios se aparto de él.)- Después Sansón se enamoró de una mujer llamada Dalila, que vivía en el valle de Sore. Los jefes de los filisteos fueron a ver a Dalila, y le dijeron: –Engaña a Sansón y averigua de dónde le vienen sus fuerzas extraordinarias, y cómo podríamos vencerle; así podremos atarle y tenerle sujeto. A cambio de tus servicios, cada uno de nosotros te dará mil cien monedas de plata. -Entonces ella dijo a Sansón: –Por favor, dime de dónde te vienen esas fuerzas extraordinarias. ¿Hay algún modo de atarte sin que te puedas soltar?-Sansón le respondió: –Si me atan con siete cuerdas de arco que todavía no estén secas, perderé mi fuerza y seré un hombre común y corriente. Los jefes de los filisteos llevaron a Dalila siete cuerdas de arco nuevas, y con ellas Dalila ató a Sansón. Y como ya antes había escondido a unos hombres en su cuarto, gritó: –¡Sansón, te atacan los f...

"¿Las Cuatro Leyes Espirituales, cuales son?"

Respuesta: Las Cuatro Leyes Espirituales son una manera de compartir las buenas nuevas de salvación disponible por la fe en Jesucristo. Es una manera simple de organizar la información importante en el Evangelio en cuatro puntos.  La primera de las Cuatro Leyes Espirituales es “Dios le ama y tiene un plan maravilloso para su vida”. Juan 3:16 nos dice, “Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna”. Juan 10:10 nos da la razón por la que vino Jesús. “He venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia”. ¿Qué nos impide experimentar el amor de Dios? ¿Qué nos impide tener una vida abundante? La segunda de las Cuatro Leyes Espirituales es, “La humanidad está contaminada por el pecado, y por tanto está separada de Dios. Como resultado, no podemos conocer el maravilloso plan de Dios para nuestras vidas”. Romanos 3:23 afirma esta información, “Por cuanto todos pecaron, y e...

No le des la espalda a Dios, por tu propio bien!

No te expongas al peligro, por tu propia voluntad Muchos sabemos lo que es estar en una situación difícil, cuesta arriba  o en una pendiente muy inclinada y resbaladiza, ya sea por agua, lodo,  hielo o cascajo suelto. Hace años atrás, hablaba con un amigo y hermano en cristo, acerca de las entonces dificultades y obstáculos que un cristiano suele enfrentar en su diario vivir. Cuando alguien usa estas palabras  «estoy en una situación difícil y no quiero fallarle a Dios»  para tratar de evitar un paso en falso, aunque sea pequeño, en una dirección peligrosa, entendemos muy bien la advertencia. Sentimos ansiedad por una decisión que, de pronto, podría colocarnos en un terreno perjudicial (peligroso). Muchos también sabemos que la Biblia describe los caminos resbaladizos en los que terminamos cuando deliberadamente le damos la espalda a Dios. El profeta Jeremías se refiere a aquellos que voluntariamente ignoran el peligro real, la palabra d...